Fue un martes soñado para el mexicano Érick Gutiérrez. Ante un duro rival como Mónaco, consiguió con el PSV una clasificación épica a la última instancia de playoffs clasificatoria a la fase de grupos de la Champions League. Para ello aportó un gol, que fue además el primero para él en la competencia más importante del mundo a nivel de clubes.
Tras haber igualado 1-1 en el partido de ida, el equipo holandés tuvo la oportunidad de definir la serie en su estadio y el encuentro fue tan parejo como el anterior, al punto que hasta el minuto 89 eran los franceses quienes ganaban 2-1 el partido y estaban metiéndose en la siguiente instancia.
Fue entonces que Érick Gutiérrez marcó el tanto que gritó con alma y vida, pues sirvió para forzar los tiempos extras -pues ya no corre la ley del gol de visitante que hubiese clasificado al Mónaco de todos modos- en que Luke de Jong puso el 3-2 definitivo para avanzar a la siguiente instancia.
“Es una sensación única. No hago muchos goles, pero cuando los hago los festejo al máximo. Es otra noche inolvidable para mí”, expresó el mediocampista de 27 años al que le había tocado ingresar en partido desde el banco de suplentes, reemplazando a Guus Til a los 67 minutos de juego.
¿Qué viene para PSV en Champions?
En la fase final de playoffs clasificatoria al cuadro principal de fase de grupos, PSV deberá afrontar una serie eliminatoria ante Rangers de Escocia que a priori se juzga más accesible que la recientemente disputada ante Mónaco. El partido de ida será el martes 16 de agosto en Glasgoy y la revancha el miércoles 24 en los Países Bajos.