En Qatar no han querido dejar detalle librado al azar. En el transcurso de la Copa del Mundo, no dejaron esfuerzo por hacer para terminar de ganarse la confianza y la aceptación de los aficionados de todo el planeta después de haber sido una de las sedes que más polémica generó en la historia por su elección.
El domingo es de fiesta por ser la culminación de todo el proceso. En la gran final que se disputa en el Estadio Iconic de Lusail se enfrentan las selecciones de Argentina y Francia; también un guiño para los jeques que han invertido dinero en llevar al PSG a Lionel Messi y Kylian Mbappé. Redondo.
Para agasajar a las decenas de miles de aficionados que obtuvieron su boleto para ser testigos del último partido de la Copa del Mundo de Qatar, igual que sucedió en el estreno que tan lejano quedó ya entre el seleccionado local y Ecuador, hubo souvenir sorpresa en cada una de las butacas.
Fue un aficionado de la Selección Argentina, visiblemente emocionado, quien compartió con las cámaras de TUDN el primer regalo que obtuvo en el estadio, deseoso de atesorar uno mucho más grande una vez que la gran final haya finalizado haciendo inevitable la nostalgia por comenzar a entender cuánto faltará para una próxima edición.
El detalle qatarí fue esta vez una muy bonita pulsera, que lleva inscripta la fecha de la gran final del Mundial de Qatar, el nombre del estadio que tiene el privilegio de albergarla y las banderas de Francia y Argentina, los dos equipos que van por la gloria máxima. ¡Que sea futbol!
