Aunque era una de las figuras a seguir en México 1986, Hugo Sánchez no participó en uno de los momentos más emblemáticos en los preparativos de aquel Mundial: el videoclip que los futbolistas de la selección mexicana grabaron para el tema musical que desde entonces ha hecho vibrar a los aficionados con su inolvidable estribillo: “El equipo tricolor tiene mucho corazón y en la cancha lo demostrará…”.

Fueron 22 los futbolistas convocados para las Copa del Mundo México 86, y 21 de ellos participaron en el memorable videoclip, desde el más novato del grupo Francisco Javier Cruz, el joven Abuelo de 20 años de edad, hasta el más veterano, el Jefe Tomás Boy, entonces de 33 años.

El primer rostro que aparece en el videoclip es el de Olaf Heredia, uno de los tres porteros bigotones que tuvo aquella selección mexicana, junto con Pablo Larios e Ignacio Rodríguez. Inmediatamente después sale Mario Alberto Trejo. Pronto se ve a un entusiasta Javier el Vasco Aguirre llevando el ritmo con la mano derecha y abrazando a su izquierda a Cristóbal Ortega.

Uno a uno fueron apareciendo los 21 seleccionados uniformados con una vistosa ropa de concentración: un conjunto deportivo en color verde con vivos en blanco y rojo. En grupos de tres o cuatro jugadores, equipados con audífonos y atriles, todos participaron con entusiasmo y muy hermanados, incluso Carlos Hermosillo y Fernando Quirarte, que meses después habrían de desatar una bronca en el clásico nacional de la temporada 1986-87 por una rencilla que brotó entre ellos en un entrenamiento de esa selección. En el puente musical, Miguel España y Javier el Chícharo Hernández -papá del Chicharito- muy sonrientes intentan seguir el ritmo de la canción con la mano derecha.

La ausencia de Hugo Sánchez, que para entonces ya era figura del Real Madrid, fue notable. Ni siquiera apareció en la portada del disco que contenía dos temas: en el lado A estaba “Adelante México”, que es el verdadero título de ese tema que muchos piensan que se llama “El equipo tricolor” y el lado B tenía “La ola verde”, ambos temas compuestos por Rafael Guadarrama y Manuel Bautista. En la contraportada del disco aparecían las caritas de los 21 jugadores, cada uno con su autógrafo. Todos estuvieron menos Hugo Sánchez.

Si bien la ausencia de Hugo Sánchez es notable, hubo alguien que no aparece ni en el videoclip ni en la funda del disco, pero su presencia fue indispensable para la realización del tema musical. Rubén Cerda es su nombre.

-Rubén Cerda, talentoso y versátil-

Rubén Cerda es contemporáneo de aquellos jugadores de la selección mexicana del Mundial México 86; nació en 1961, el mismo año que los seleccionados Alejandro Domínguez, Félix Cruz, Luis Flores y Javier Chícharo Hernández.

Rubén Cerda todavía no cumplía un año de edad cuando empezaba a ser conocido en todo México pues su rostro de bebé con ojos azules fue la imagen de los productos Gerber desde 1962 hasta 1973. Durante su infancia se reveló su talento para las imitaciones y la actuación; hizo comerciales para la leche Nestógeno, pantalones Gacela, Choco Milk y más.

También se descubrió como cantante e hizo jingles para los indolvidables juguetes Lily Ledy y Plastimarx. “Toda mi vida a sido musical, tendría yo como seis o siete años cuando comencé a cantar”, comparte Rubén Cerda en entrevista para Bolavip. "Desde niño comencé esta faceta de cantante, nunca la dejé, siempre seguí cantando. Me convertí en adulto y seguí haciendo muchos jingles para muchas marcas y me fui desarrollando como cantante".

Con el paso del tiempo, Rubén Cerda participó como corista de cantantes como Susana Zabaleta, Cristian Castro, María Medina, María del Sol, Arianna, y fue parte del Coro de los Hermanos Zavala de más de 100 voces.

Además, Rubén Cerda ha desarrollado su carrera como actor con personajes como Gordonio Arredondo de la Maza en el programa La escuelita con Jorge Ortiz de Pinedo y ha sido el Santa Claus de Coca Cola. Además como actor de doblaje ha prestado su voz para darle vida al dinosaurio Barney y a Mickey Mouse.

Y en medio de esta sorprendente trayectoria se convirtió en parte esencial del Mundial México 1986. “Adelante, México”, el tema con el extrinillo “el equipo tricolor tiene mucho corazón…” se puede entender sin Hugo Sánchez, pero no hubiera sido posible sin el talento y la versatilidad de Rubén Cerda.

-Cantaron de la patada-

Como cantantes, los jugadores de la selección mexicana de 1986 eran muy buenos futbolistas. En efecto, Televisa los llevó a un estudio y, como se ve en el videoclip, cantaron, pero el resultado de la grabación no daba para grabar el disco.

"Como dice mi abuelita: ‘zapatero a tus zapatos’, pues ellos cantaron de la patada propiamente dicho”, comenta Rubén Cerda entre risas. “Yo creo que algunos sí eran entonados o afinados”, complementa, y tiene razón pues entre los seleccionados estaba Carlos de los Cobos quien ha gustado de cantar desde que era futbolista.

"A lo mejor no eran muy buenos cantantes, pero sí extraordinarios futbolistas", añade Rubén Cerda y recuerda que en los meses previos al Mundial México 86 le compartieron la canción grabada por los jugadores “y a mí me piden que si puedo yo regrabar las voces de ellos, entonces yo regrabé todas las voces, me pidieron que hiciera diferentes timbres de voz para que no se oyera al 'burrísono' sino que se oyeran diferentes timbres y que se oyera que había muchas personas cantando".

El proceso de grabación del tema “Adelante, México” fue muy detallado, según recuerda Rubén Cerda: "Se fue grabando por canales, en la consola había hasta 36 canales y se grababa en una cinta gruesota. La pista musical estaba grabada en dos canales, en estereo, había un canal derecho y un canal izquierdo, y de los 36 canales quedaban 34 para meterle voces; por lo que se ve en el video yo calculo que había unos 20 jugadores, entonces sobraban canales".

Rubén Cerda cantó todo el tema del equipo tricolor en varias ocasiones, una por cada timbre de voz que emitió: “se fue grabando la canción en distintos canales y con diferentes voces, y a la hora que se corre la grabación sobre la pista musical se escuchan todas las voces al mismo tiempo”. Así es que se logró el vigoroso tema musical del equipo Tricolor en el Mundiañ México 86.

Pero Rubén Cerda no sólo hizo la grabación para el disco, también participó en el videoclip y su labor consistió en hacer que el movimiento de labios de los jugadores coincidiera con la canción. "Lo que hice fue una especie de doblaje”, cuenta el actor y cantante. “Hay tomas en las que se hicieron acercamientos a los futbolistas y destacaban su voz en ese momento para que se viera que estaba presente. Cuando salía la imagen de cada futbolista subían un poco más el volumen para que se oyera destacado. Lo que se hacía es que si a la hora de grabarlo su lyp sinc (sincronización de movimientos labiales al hablar o cantar) era diferente a los demás yo tenía que empatarme con ese movimiento de labios para que se viera más natural. Cuando había algo en particular yo grababa ese pedacito nada más para poder destacar ese momento”.

-Orgullo por México 86-

El Mundial México 86 se va quedando atrás en el tiempo, pero en la memoria permanecen Pique, la mascota; el balón Azteca de Adidas; Mar Castro, la Siquitibum; Diego Armando Maradona, la gran figura del torneo; y, por supuesto, los temas musicales conmemorativos.

Al paso del tiempo mucha gente sigue en la creencia de que las voces que escuchan en el festivo y vigoroso estribillo de “el equipo tricolor tiene mucho corazón y en la cancha lo demostrará” son de los futbolistas, pero no, todas le pertenecen a Rubén Cerda.

Los años han pasado desde el Mundial México 86 con su memorable tema musical, y Rubén Cerda no se siente amargado, resentido o decepcionado porque no se le reconoce como el hacedor de las voces del tema “Adelante, México".

"Yo me acuerdo que me divertí muchísimo”, rememora Rubén Cerda. "Fue una experiencia muy padre porque todo mundo veía a los integrantes de la selección cantando, pero no sabían que el que estaba atrás era yo, como pasa con muchos grupos coreográficos vocales; pasaba mucho que había un cantante de atrás de esos grupos”.

Sobre su valiosa participación en el Mundial México 86, Rubén Cerda reflexiona y concluye: "Siente uno padre porque de alguna manera fui historia. Lo realmente importante es hacer algo por tu país y por ello me siento orgulloso. Se siente muy padre por haber sido parte de esto y por que haya quedado una canción icónica de nuestro país y de la historia del futbol en México".