En la vorágine de las noticias, sean deportivas o de cualquier tipo, uno se pierde en la cotidianeidad, en informar con veracidad y velocidad con la mayor cantidad de datos posibles. Como periodistas, estamos todos los días y a todas horaspendientes a losúltimos acontecimientospara trasladarlosa los que la buscan, a la audiencia que nos debemos.
Esto, a veces, hace también perder la perspectiva. La vida está más allá de lo cotidiano y cada tanto sucede algo para que esta realidad nos explote en la cara. Este martes 9 de noviembre, un acontecimiento de este tipo volvió a hacernos acordar de lo importante.
Y es que cerca al medio día de Perú, trascendió que Pierre Manrique había fallecido. El comunicador que contaba con credibilidad, respaldo internacionaly tenía siempre primicias, excelentes entrevistas y era una fuenta a consultar en todo momento, abandonaba este mundo.
Tras esto, distintos colegas comenzaron a manifestarse en las redes sociales. Obviamente, los primeros fueron sus más cercanos. Los de Perú escribieron sus respectivos posteos. Solo minutos después, desde Argentina, donde también se ganó el respeto, hicieron eco de la noticia. También lo despidieron con palabras emotivas.
Juan Pablo Varsky, por ejemplo, escribió lo siguiente: “Falleció Pierre Manrique, colega peruano que hizo gran parte de su carrera en Argentina, en Rivadavia y La Red, entre otros medios. Muy trabajador. Respetuoso y respetado. Desde aquí, nuestras condolencias y abrazos a familiares y amigos. QEPD”. Desde acá, también lo homenajeamos y aplaudimos por su labor ¡Gracias Pierre!
