Antes de la suspensión de actividades por la pandemia de coronavirus, Los Angeles Lakers estaban atravesando una temporada de ensueño, actualmente ocupando la primera posición de la Conferencia Oeste.
El equipo angelino se perfilaba como la potencia más fuerte de su lado de la nación y eran muy pocos los rivales que representaban una verdadera amenaza en la postemporada.
En este sentido, cuando a Danny Green le preguntaron por qué al equipo le había ido tan bien este año, se limitó a responder lo obvio: la relación y los aportes de Anthony Davis y LeBron James:
“Nuestos líderes. Nuestras dos estrellas. Me encanta. Se aceptan el uno al otro, se apoyan el uno al otro. Son los mejores amigos. Siempre están juntos y nos contagian con esa dinámica”, comentó Green.
James y Davis mantienen una amistad cercana incluso desde antes de la llegada del ala-pívot proveniente de los New Orleans Pelicans. No obstante, Green también resaltó los aportes del resto del equipo:
“Además, creo que nuestra profundidad también nos ayuda con eso. Tenemos tantas personas que juegan bien que no todos tenemos suficientes minutos. Pero no se trata de nosotros, sino del equipo, así que realmente no nos importan los minutos. Minetras estemos ganando y jugando bien, sabes que todos estaremos bien”, concluyó el escolta.
Claro está que si se reanuda la temporada de la forma que se espera, la profundidad del banquillo de los Lakers jugará un papel fundamental en los playoffs. Igualmente, llegarán tan lejos como su dúo dinámico pueda llevarlos.