Es verdad que no la tenía para nada fácil, pero no fueron pocos quienes afirmaron que el reinicio de la temporada 2019-2020 de la NBA, era el pretexto ideal para ver en cancha a Zion Williamson, el novato estrella llegado de la Universidad de Duke, y darle la posibilidad a New Orleans Pelicans de llegar a los Playoffs.

Sin embargo, el intento terminó siendo un fracaso rotundo. Y son varios los factores que podrían explicar el porqué la franquicia de Louisiana no termina en la postemporada, con la mayoría de ellos rodeando al ala-pivot de 20 años, ya sea por situaciones propias o por factores externos.

Los números hablan por si solos. De los 70 partidos que los Pelicans han jugado en esta temporada, recortada por la pandemia del Coronavirus, Williamson apenas jugó 24 compromisos, en los cuales promedio 22.5 puntos, 6.3 rebotes, 2.1 asistencias, 0.4 bloqueos y 2.5 pérdidas de balón por encuentro.

A esto se suma que se perdió gran parte del comienzo del presente certamen por una lesión de meniscos en su rodilla derecha, recién pudiendo debutar en enero de este año, y más encima, con el parate por el COVID-19, estuvo trabajando a fin de recuperar su mejor forma física, pero ahí contó con la negativa del staff médico del equipo y su entrenador Alvin Gentry, de darle más minutos en la burbuja de Orlando, y cuando se le necesitó, ya era demasiado tarde.

De los seis partidos que jugó New Orleans en Disney World, sólo ganaron dos partidos, ante Memphis Grizzlies y Washington Wizards, perdiendo el resto, y con Zion sin jugar en el duelo clave ante Sacramento Kings, llegando a un récord actual de 30-40.

¿Qué le deparará la próxima temporada a Zion Williamson?