Luego de una semana muy agitada, se puso a rodar el esférico en el marco de la séptima fecha de la Superliga Argentina de Primera División. Fue en el Estadio Libertadores de América del barrio de Avellaneda.

Allí, con un equipo alternativo y pensando en la revancha ante River del próximo martes, Independiente recibió al golpeado Tigre, que viene de quedarse sin entrenador y muy complicado con el descenso.

Para colmo de males, promediando la primera parte, el conjunto de Victoria tuvo un penal en contra. Y el encargo de ejecutarlo para el equipo que comanda estratégicamente Ariel Holan fue Gonzalo Verón.

Sin embargo, el ex futbolista de San Lorenzo de Almagro tomó poca carrera, anunció mucho su remate y el disparo fue contenido por Augusto Batalla, que se lució para mantener viva la esperanza del ‘Matador’.