Mauricio Macri, dirigente político que cobró popularidad al frente de Boca Juniors, fue electo como el nuevo presidente de Argentina.
Si encabezó uno de los procesos más exitosos en la historia del club, ¿por qué no puede gobernar un país? Fue un argumento que se repitió durante más de una década, carente de cualquier análisis y más fruto de un deseo de renovación, ante un gobierno saliente que despertó amores y odios, que de una idea de gestión.
Boca consiguió 17 títulos con Macri como presidente.
Mauricio Macri dejó la empresa familiar hace unas dos décadas, se adentró en la conducción de un gigante como Boca Juniors y, desde el 10 de diciembre, se hará cargo de una mucho mayor. Será el primer presidente en Argentina con pasado como dirigente de fútbol, juego que lo encontró gritando goles el mismo día de la elección.
En su primera conferencia de prensa tras ser electo, le preguntaron por River, eterno rival, y bromeó con recibirlo en caso de que gane el Mundial de Clubes.
Hubo festejos y angustias, confianza ciega y mares de dudas, y protagonistas poco comunes en elecciones anteriores, que aprovecharon para saludar.
+Un gol para festejar