Fue un encuentro de dos equipos con características muy disímiles, pero uno lo practico a la perfección y al otro le falto mucha más profundidad y cambio de ritmo.

Dorados le ganó bien al Querétaro por 3 a 1 en La Corregidora, en la segunda jornada del grupo C de la Copa MX, y pinta para ser un rival difícil para el que lo enfrente en esta competición.

Desde el inicio pudimos observar lo que iba a ser una constante en todo el partido: Los Gallos tenían la pelota y buscaban avanzar, pero eran muy previsibles en los últimos metros y los dirigidos por Diego Maradona se defendieron muy bien (casi siempre) a lo largo de los 90 minutos.

A los 24 minutos, un tiro libre precioso de Rubio Méndez se clavó en el segundo palo del arco defendido por Luis Romo.

A los 57, un despeje encontró un pique al espacio de Amaury Escoto, que arrancó en mitad de cancha y se fue solo ante el arquero del local. Inexplicable lo mal que defendió el Querétaro esta acción. Los cuatro defensores estaban en línea y sobre el mediocampo.

Los dos refuerzos le respondían de la mejor forma a Maradona, que además contó con una gran performance de Gustavo Canto en la defensa.

A los 77 minutos, una jugada confusa en el área del visitante terminó con el gol de cabeza de Ake Arnaud Loba, que le daba esperanzas a los dirigidos por Rafael Puente.

Pero todo esto se esfumó a los 88 minutos: Benjamín Palazuelos decretó el triunfo con un remate dentro del área, luego de un blooper insólito de la defensa rival.

Enorme victoria del Gran Pez, que sueña con terminar líder de un grupo que también tiene a Zapatec.