El ingreso de las SAD (Sociedades Anónimas Deportivas) es una cuestión de Estado para Mauricio Macri y el PRO presentará un proyecto de ley en el Congreso para hacerlo posible. Lo que no pudo como presidente de Boca a través de AFA allá por el 2001, buscará conseguirlo desde el Poder Ejecutivo del país.
“Fue mi mayor fracaso político. Mi propuesta perdió 38 a 1, el único voto a favor fue el mío”, recuerda Macri aquél intento en el año 1999.
En 2001 se produjo la quiebra de ISL, red de empresas fantasmas inventada exclusivamente para que FIFA pueda otorgarles los derechos de la transmisión de Mundiales y principales competencias a determinados allegados, a cambio de millonarios sobornos. Las esquirlas de aquella quiebra son las que hoy voltearon media FIFA.
Unos meses antes, el 30 de noviembre de 2000, los socios de San Lorenzo detuvieron un contrato que Fernando Miele había aprobado en asamblea y le cedía a dicha empresa los derechos de imagen del club por 10 años, una especie de privatización encubierta, ya que el estatuto de AFA (hasta el día de hoy, por ahora), no permite la participación de Sociedades Anónimas, solo a través de gerenciamientos. Uno de los puntos del contrato era, por ejemplo, que los socios de San Lorenzo no puedan acceder a ningún tipo de información sobre el vínculo.
Los hinchas del Ciclón festejan cada 30 de noviembre aquella resistencia, que incluyó represión policial con balas de goma y gases lacrimógenos.
$bp(“Brid_71983586”, {“id”:”6125″,”width”:”100%”,”height”:”400″,”video”:”60129″});
Entendiendo la coyuntura actual, el club que preside Matías Lammens fue el primero en manifestarse oficialmente en contra de las Sociedades Anónimas. “San Lorenzo fue, es y será de los Socios.”, aseguró en asamblea.
En el año 2000 una asamblea en Boca frenó un preacuerdo con ISL similar al de San Lorenzo. El proyecto era, claro, liderado por Macri y el oficialismo de aquél entonces.
¿Qué hubiera pasado con Boca y San Lorenzo si esos contratos avanzaban? La historia hoy certifica que todo lo que ISL tocó explotó por los aires. Blatter se los puede contar mejor.
Es difícil imaginar que Boca hoy se manifieste en contra de las Sociedades Anónimas con Angelici, delfín de Macri, en el poder, sino todo lo contrario. Es el operador principal que tiene el presidente del país a nivel AFA y dentro del poder judicial, quien lleva adelante el trabajo de campo para los distintos pasos necesarios que el proyecto requiere.
Haber entrometido a la Inspección General de Justicia en AFA para frenar las elecciones, promover una Superliga inspirada en la Liga de España o hasta la intención de una nueva Bombonera, que permitiría al club de La Boca endeudarse, condición inicial para la transformación en S.A.
Del otro lado, River, se puso en la vereda de enfrente. Su presidente, Rodolfo D’Onofrio se proclamó en contra de las mismas, y abrió el debate internamente en una asamblea, donde el no fue rotund y unánime. Los 124 asambleistas determinaron que River debe seguir siendo una Asociación Civil.
“Pooorque Racing es mi vida, no la empresa de Marín”, se cantaba en el Cilindro de Avellaneda. En el año 1999 el presidente Héctor Lalín solicitó la quiebra y en el 2000 desembarcó en el club el gerenciamiento a cargo de Fernando Marín. Más allá del título en 2001, Racing asociación civil aumentó su deuda durante el mandato y tampoco hubo claridad en los traspasos de los jugadores realizados en aquél período. El pase de Mariano González fue triangulado a una empresa llamada Visnar (a la cual Blanquiceleste S.A. le vendió el jugador por 800.000 dólares, para luego pasar a Palermo por 5 millones).
Todos los días nos llegaba un reclamo nuevo por cosas que firmó Blanquiceleste y no cumplió
Tras 6 años de gestión, Marín le dejó su lugar a Fernando De Tomaso, un hincha de River con pasado en JP Morgan, Goldman Sachs y Bear Sterns. Duró tres años. Entre marchas de los hinchas y malas campañas, Blanquiceleste tuvo que dejar el club, que a fines de 2008 volvió a manos de los socios. “Todos los días nos llegaba un reclamo nuevo por cosas que firmó Blanquiceleste y no cumplió”, confesó Rodolfo Molina, presidente electo que sucedió a la gerenciadora. La Justicia condenó a De Tomaso a pagar un millón de dólares de resarcimiento a Racing, tras comprobarse “administración fraudulenta”
$bp(“Brid_71984107”, {“id”:”6125″,”width”:”100%”,”height”:”400″,”video”:”60132″});
Marín y Miele habían acompañado a Macri en aquél fracasado proyecto en 2001. ¿Qué fue de Miele? Expulsado de San Lorenzo por administración fraudulenta. Marín, por su parte, es el hombre que eligió el presidente nacional para el Fútbol para Todos.
“Es la entrada a un fútbol moderno y dinámico como en el resto del mundo”, asevera Macri. “Empiezan a venir capitales, ponen nombres fantasmas y terminan siendo dueños de cinco clubes, esto pasa en el mundo”, responde Nicolás Russo, presidente de Lanús.
El grondonismo tapó el fútbol con un manto de impunidad que hoy, ya sin Grondona, expone un sinfín de falencias y miserias. Se entiende desde este lugar que el presidente llame a las Sociedades Anónimas para aportar “transparencia”. Pero que se entienda también que esta puede ser aún más difícil con tal modelo.
No era transparente ISL, empresa que estuvo cerca de desembarcar en San Lorenzo y Boca. No lo fue Blanquiliceste S.A. “Hay cientos de clubes centenarios, pero me sobran los dedos de las manos para encontrar empresas centenarias.”, sentencia César Francis, abogado, periodista y vocal de San Lorenzo.
Un modelo que en España destruye clubes día a día
El prototipo de la Superliga (que FIFA no aprobó) está copiado y pegado de la Liga de España, la cual dirige Javier Tebas, quien estuvo en el país explicando las bondades de su modelo. Lo que no explicó es que, como contó Ezequiel Fernández Moores en La Nación, asesoró a patrones que fundieron equipos en España, como el ucraniano Dimitri Piterman, ex dueño del Alavés, o Manuel Ruíz de Lopera, condenado por gestión “negligente” en el Betis e inhabilitado a ejercer cargos por 15 años. También trabajó para clubes que terminaron quebrados, como el Badajoz que gerenció Tinelli, que hoy tiene que jugar bajo el nombre CD Badajoz 1905 en la Liga de Extremadura.
Tebas asesoró a Piterman y Manuel Ruiz de Lopera, quienes fundieron Alavés y Betis respectivamente
Otro ejemplo es el del indio Ali Syed, quien adquirió un quebrado Racing de Santander mediante su empresa Western Gulf Advisory que se dedicaba a prometer préstamos a empresas en crisis, pedir un adelanto de intereses y desaparecer sin nunca devolver esa plata ni otorgar el préstamo.
Su llegada a Racing fue similar. Si bien pagó el mínimo para que el club no sea embargado, se dedicó a prometer y no cumplir. No pagó la compra del club a los accionarios anteriores, no le pagó al fisco las deudas que había prometido, ni a la plantilla los sueldos adeudados.
En realidad, esperaba que la familia real de Bahereín se haga cargo de esos pagos y tome en control del club, siendo Syed el intermediario. La Primavera Árabe desestabilizó a la realeza, que nunca se mostró por el Sardinero. El problema es que Syed tampoco, desapareció dejando un caos absoluto en Racing.
En los Panamá Papers figuran dos offshore a su nombre, las cuales utilizó para estafar al Racing y a otras empresas en distintos países.
No sólo pasa en España…
No hay que irse tan lejos para comprender el concepto. Unión de Mar del Plata subió en pocos años del Argentino B a la B Nacional, para luego abandonar el fútbol profesional. El mismo coincide con el arresto de su mecenas, Francisco “Cacho” Pagano, acusado de supuesto lavado de 24 millones de dólares.
Y tampoco hay que recurrir a casos periféricos, los hinchas de Manchester United no están nada conformes con la gestión de la familia Glazer, dueños americanos del club. Como no pueden votar su salida, ni nada, un puñado de hinchas decidió armar un nuevo club: Football Club United of Manchester
“Para una asociación civil, un balance equilibrado en cero es un éxito. Para una empresa es una derrota, porque no hay ganancia.”, agrega Francis. Y de este lado del mundo, este punto es clave.
“Lanús tiene más de treinta disciplinas deficitarias. Si esto fuera una sociedad anónima no queda ni una, no existirían. Lanús es un club que ha crecido tremendamente. Una sociedad anónima no hubiera hecho un colegio como acá, una cancha de hockey, de hándbol, que la plata que genere el club deba volver al club.”, explica Russo.
Los clubes, en estas tierras donde las diferencias sociales son extensas, cumplen un rol que no cabe en una cuenta bancaria, que está más allá de un balance positivo, negativo o una cuenta offshore. Un rol social de contención y educación, sumamente necesario.
Hay mucho que corregir en los clubes, empezando por aprender a contar votos. Pero no es cierto que la única salida posible sean las Sociedades Anónimas, sobran los contraejemplos. Quizá, reforzar las herramientas democráticas, organismos de control y estatutos; sea un camino más acorde a la realidad y contexto histórico.