Quizá de forma algo injusta, Lucas Ocampos está directamente asociado con la peor época de la historia de River.

Figura en aquel equipo que disputaba sus primeros 6 meses en el Nacional B, el joven se fue vendido a Francia por una cifra millonaria que, años después, parece haber quedado chica.

Ya asentado en el Olympique de Marsella, el volante suma pretendientes alrededor del mundo. Uno de ellos es el Sevilla, club que ofertaría por él en el presente mercado de pases.

Sin embargo, el surgido en Quilmes disfruta ahora de sus vacaciones junto a su familia. Y subió una foto muy linda para festejar el final de las mismas.

“Mi mundo. Se terminaron las vacaciones, con ustedes todo es más hermoso. ¡Las amo!”, escribió en una imagen en la que se la puede ver junto aMajo,su pareja y su pequeña hija. ¡Divinos!