Allen Iverson llegó a la NBA en medio de demasiada controversia. Siendo uno de los atletas más talentosos de la nación a su corta edad, el escolta debió pasar un tiempo en la prisión por un incidente fuera de las canchas.
Al llegar a la liga, Iverson demostró rápidamente por qué había sido tomado con la primera selección global del sorteo gracias a sus movimientos ágiles y acrobáticos, su irreverencia y su poder anotador incomprable.
Por eso, la primera vez que Iversondebió cruzarse con Michael Jordan y sus legendarios Chicago Bulls, el mejor jugador de todos los tiempos no reparó en darle una bienvenida un pocoinusualal novato estrella de Philadelphia.
Jordan, fiel a su naturaleza competitiva y a su amor por meterse en la mente de sus contrincantes, no tardó en imponer su condición de superioridad ante el joven.
“Nunca olvidaré la primera vez que hablé con él, porque me dijo: ¿Qué te pasa, pequeña p*rra?”
Así, Iverson resaltó lo intimidante que podía ser la presencia de Michael Jordan, que para ese entonces ya estaba establecido como el mejor jugador de la liga.
Sin embargo, Iverson no tardó en ganarse el respeto de Air Jordan, al ridiculizarlo por completo y romper sus tobillos con un gran crossover, algo que pocos jugadores alguna vez lograron, ni hablar en su año de novato.
Durante su carrera, Iversonpromedió 26.7 puntos, 3.7 rebotes y 6.2 asistencias, ganó un MVP, lideró la liga en robos 3 veces y 4 veces en anotación; convirtiéndose en uno de los mejores jugadores de todos los tiempos.