La espera no termina nunca y la final de Copa Libertadores entre Rivery Boca ya se convirtió en la más larga de la historia. Este martes, en la sede que Conmebol tiene en Asunción, se espera que todo empiece a definirse de una vez.
Allí, el presidente del ente sudamericano Alejandro Domínguez recibirá a los mandatarios de Rivery Boca, RodolfoD’Onofrioy Daniel Angelici, quienes esgrimirán sus intenciones.
Pero el encargado de decidir no será el presidente de Conmebol, sino un Tribunal de Disciplina compuesto por cinco miembros, de los cuales uno no tendrá poder de voto por ser argentino.
Los encargados de formular el veredicto final sobre las condiciones en que se disputará, si se disputa, la final de la Copa Libertadores entre Rivery Boca son Eduardo Gross Brown, de Paraguay; Amarilis Belisario, de Venezuela; Antonio Carlos Meccia, de Brasil; Cristobal Valdés, de Chile; y Diego Pirota, quien participará del debate pero no votará por su nacionalidad argentina.