Poco a poco se está volviendo a la normalidad, dentro de lo que cabe, en la Major League Baseball. Este viernes los Chicago Cubs festejaron por todo lo alto haber llenado su estadio, el legendario Wrigley Field, por primera vez en los últimos casi dos años debido a la aparición de la pandemia por el Coronavirus.
Con el nombre de “Opening Day 2.0” los Chicago Cubs comenzaron la celebración ante sus fanáticos en el partido ante los St. Louis Cardinals. Con la leyenda “Bienvenidos a casa” detrás del home, el Wrigley Field mostró su mejor cara para recibir a una gran cantidad de aficionados que disfrutaron algo más que un juego de béisbol.
Antes del partido, el lanzamiento inicial lo realizaron jugadores emblemáticos de los Chicago Cubs Andre Dawson, Fergie Jenkins, Ryne Sandberg y Lee Smith. Para el séptimo episodio, elhumorista y fanático de los Cubs, Bill Murray tuvo una participación especial que encantó a los aficionados.
Festejo con victoria incluída
La celebración de este viernes luego devolver a jugar a total capacidad en el Wrigley Field la coronaron los Chicago Cubs con una victoria sobre los St. Louis Cardinals, con pizarra de 8 carreras por 5, en un partido en el que Anthony Rizzo se fue para la calle al igual que Joc Pederson.
El cuadrangular de Rizzo tuvo una particularidad y es que llegó en un turno en el que vio 14 lanzamientos de parte de Daniel Ponce de León. Es el turno más largo para un jugador de los Cubs desde 1988. Tras su conexión, Rizzo se retiró al dugout en medio de la celebración de la fanaticada que volvió a celebrar en su casa.