Lamentablemente, el fútbol peruano tiene semana tras semana eventos de indisciplina. Los jugaodores nacionales no tienen una formación más alla de lo deportivo y eso se ve a diario.

Así como el año pasado pasó con Deza, Ascues, Gómez, Zela, Sandoval y Beto da Silva, este año ya hay noticias de este tipo. El caso de Corzo es una muestra.

Ahora, una semana después, apareció otra situación similar. Kevin Quevedo fue ampayado en una fiesta y después fue intervenido pidiendole explicaciones. El jugador se puso un poco agresivo.

Se esperaba entonces, así como pasó con la U con Aldo Corzo que fue separado y después sancionado, un castigo inmediato para el jugador. El club dominó sacó un comunicado.

En él dicen que promueven el respeto de los protocolos y la salud del plantel. Sin embargo, agregan que en el caso de Kevin Quevedo solo se abrirá una investigación.

Quizas, en un futuro, tras las averiguaciones, sí se le castigue. Por ahora, sin embargo, el atacante podrá entrenar como si no pasó nada. En fin, cada club tiene sus criterios…