Entre los muchos jugadores que siendo propiedad de Boca están repartidos a préstamo por toda América, al colombiano Sebastián Pérez le llega la hora de volver a partir de enero de 2020. Pero su futuro es todavía incierto.
El mediocampista central que llegó al Xeneize en 2016, como figura del Atlético Nacional que se coronó campeón de la Copa Libertadores de aquel año, ha estado cedido en el Pachuca de México y en Barcelona SC de Ecuador.
Miguel Russo, que en horas sería confirmado como el nuevo entrenador de Boca, tendría intenciones de probar si el colombiano aporta soluciones en el armado de la mitad de cancha del nuevo equipo.
Sin embargo, existen dos complicaciones que podrían frustrar la vuelta de Seba Pérez al Xeneize. La primera de ellas pasa por la corta vigencia que le queda a su contrato, que expira en junio de 2020 y obliga a pensar en la posibilidad de transferirlo para no perderlo en seis meses sin que ingrese dinero al club.
Otro problema para el colombiano y su deseo de tener revancha en Boca es el cupo de extranjeros permitido en la Superliga Argentina, que es de sies futbolistas. En la actualidad, son cinco los que tiene el Xeneize conCampuzano, Junior Alonso, Jan Hurtado, Sebastián Villa y Daniele De Rossi; porque Frank Fabbra tiene ciudadanía argentina.
El cupo se completaría con el regreso de Seba Pérez e imposibilitaría a la directiva salir a buscar un refuerzo extranjero, deseo que ya había quedado marcado cuando se sondeó la posibilidad de contratar a Paolo Guerrero.