Este viernes comenzó a disputarse una nueva fecha de la presente edición de la Copa de la Liga Profesional de Argentina, más precisamente la octava. Lo hizo con tres partidos que acapararon la atención de propios y extraños en el ámbito doméstico. En primera instancia,Patronato de Paraná venció a Aldosivi de Mar del Plata por 2-0, y, luego, San Lorenzo de Almagro doblegó a Rosario Central por el mismo marcador.
Pero faltaba una última función de la jornada y la misma se desarrolló en el imponenteEstadio Único Madre de Ciudades que había sido estrenado con la recordada paliza de River Plate frente a Racing Club en la Supercopa Argentina. En esta oportunidad, quienes se encontraron frente a frente con dicho escenario como testigo fueron Central Córdoba y Platense.
El Ferroviario, nuevamente comandado por Gustavo Coleoni, acudió a este partido como una de las grandes sorpresas del mencionado certamen doméstico. Es que, en sus primeros siete encuentros, Central Córdoba cosechó 12 unidades producto de tres victorias, tres empates y una derrota. Así se colocó como escolta del líder Colón de Santa Fe.
Por el contrario, el recientemente ascendido Calamar de Juan Manuel Llop llegó a este cotejo envuelto en grandes necesidades. Sucede que el equipo que volvió a la máxima categoría del fútbol argentino después de 22 años solamente sumó un triunfo, dos paridades y cuatro caídas en sus primeros partidos, colocándose en el fondo de la tabla.
De todas maneras, lo cierto es que la primera parte fue mucho más pareja y equilibrada de lo que se imaginaba en la previa. Si bien el anfitrión contó con las mejores oportunidades para marcar en esos 45 minutos iniciales, no tuvo efectividad y debió conformarse con una paridad sin anotaciones. Así fue como el descanso llegó con un 0-0.
+ 0-1 de Baldassarra:
Además, en la etapa complementaria, el Calamar terminó encontrando la apertura del marcador. Fue cuando transcurrían jugados 29 minutos de dicho período final, momento en que Franco Baldassarra pisó el área local para poner el 1-0en favor de Platense que posteriormente sería definitivo. Tres puntos literalmente de oro para los de Juan Manuel Llop.