En otra mañana de grandes historias para el atletismo en el Estadio Olímpico de Tokio 2020, Jasmine Camacho-Quinn logró imponerse en la final de los 100 metros con vallas con una marca de 12.37 segundos y se colgó la segunda medalla dorada de la historia para Puerto Rico en los Juegos Olímpicos.

La delegación puertorriqueña consiguió ver a una atleta en lo más alto del podio por primera vez en Río 2016. Allí, Mónica Puig ganó la dorada en la competencia individual del tenis sorprendiendo al mundo y dándone el primer título olímpico al territorio caribeño. 

 

En aquellos Juegos, Camacho-Quinn fue descalificada en las semifinales de su prueba por un mal salto sobre una valla. La nacida en Carolina del Sur, en Estados Unidos, pero que representa a la bandera de su madre, se mostró desconsolada en la cita disputada en Brasil, pero tuvo revancha 5 años más tarde. 

En la final de este lunes por la mañana en Tokio , Camacho-Quinn logró imponerse con claridad con la marca de 12.37 segundos, mientras que la estadounidense Kendra Harrison se alzó con la medalla de plata con un crono de 12.52 y la jamaiquina Megan Tapper fue tercera, con 12.55.

Batir un récord olímpico en las semifinales

Ganar la medalla dorada en la prueba y que sea la segunda en la historia para su país no es lo único que consiguió Camacho-Quinn en Tokio 2020. En las semifinales corrió en 12.26 segundos, rompiendo el récord olímpico, a sólo seis centésimas de la mejor marca mundial, perteneciente a Kendra Harrison, que se llevó la plateada este lunes.