Phil Knight, uno de los fundadores de la multinacional estadounidense Nike, lanzó una oferta para comprar a los Portland Trail Blazers, propiedad del fondo de Paul Allen, cofundador de Microsoft fallecido en 2018.

La cifra ofertada es de 2.000 millones de dólares para hacerse con la propiedad de la franquicia de la NBA, apenas por debajo del valor con el que revista Forbes cotizó (2.050 millones) al equipo de la NBA con base en Oregon, el estado en el que, justamente, se gestó a la marca deportiva el 25 de enero de 1964. Si bien su primer nombre fue Blue Ribbon Sports, la incipiente empresa cambió por Nike en 1978 cuando empezó a cotizar en la Bolsa y siempre mantuvo siempre sus oficinas centrales en Oregon, en Beaverton, apenas a 11 kilómetros de Portland.

Por su parte, Alan Smolinsky, propietario minoritario de Los Angeles Dodgers, acompañaría como socio de Knight en esta nueva aventura comercial, aunque la primera respuesta de la franquicia a través de un portavoz fue que, por el momento, el equipo “sigue sin estar en venta”, pero confirmó a ESPN la oferta. Según el periodista de la cadena estadounidense Adrian Wojnarowski, tanto Knight como Smolinsky habrían estudiado la oferta y su entrada en la Liga de básquetbol más importante del mundo hablando previamente con el comisionado Adam Silver.

Los Blazers son actualmente gestionado por Jody Allen, hermana del empresario estadounidense que murió en 2018. Este fondo del multimillonario extinto dejó entre sus planes la venta de los Blazers y los Seahawks de la NFL.

Knight, de 84 años, estudió en la universidad de Oregon y fundó Nike junto con Bill Bowerman, un entrenador de pista y campo de la Universidad de Oregon. Se estima que el fundador de la multinacional Nike tiene una fortuna superior a los 50.000 millones de dólares, que lo sitúa dentro de la lista de 25 estadounidense más ricos. Y desde su fundación, primero como Blue Ribbon Sports y luego como Nike, con Knight a la cabeza, la empresa deportiva tuvo una expansión global. De hecho, entre fines de los ´90 y los inicios del siglo XXI, tenía puntos de venta y distribuidores en más de 170 países, y su logotipo, una marca de verificación, consistente en la curva llamada “Swoosh”, la famosa pipa de Nike, se convirtió en una más valiosas del mundo. Por caso, su proceso expansivo implicó que diversificó su negocio con su línea de productos a través de numerosas adquisiciones de otras compañías del sector (operaciones de compraventa de empresas), incluidas las empresas de calzado Cole Haan (1988; vendida posteriormente en 2012) y Converse, Inc. (2003), el productor de equipos deportivos Canstar Sports, Inc. (1994; luego llamado Bauer y vendida en 2008), y la empresa de ropa y equipos deportivos Umbro (2008; vendido en 2012), entre otras. Y lo hizo siempre con el influjo que le aportó el respaldo de atletas y super estrellas como la leyenda del basquetbol Michael Jordan (tiene su propia línea de ropa), Mia Hamm, el tenista Roger Federer (se fue con Uniqlo y ahora está con On, marca de la que es uno de sus principales inversores), el golfista Tiger Woods, Cristiano Ronaldo, Lebron James y una inagotable cantera de íconos del deporte.