En los últimos tiempos, Dietmar Hopp, principal inversor del Hoffenheim de Alemania, se transformó en el presidente más odiado de dicho país y del mundo del fútbol.
¿El motivo? El máximo mandatario del conjunto europeo impulsó el cambio en la regla “50+1”, que en Alemania regula las licencias de los clubes profesoinales.
Gracias a esa regla, más de la mitad de los clubes pertenece a los socios. Así fue como se convirtió en el foco de los insultos y repudios de todas las hinchadas.
De todas maneras, Hopp podría pasar de villano a héroe en poco tiempo. El motivo es muy claro y tiene que ver con el coronavirus, la pandemia del momento.
¿Cómo? Así es. Hopp financiaa la empresa ‘CureVac’, la cual se encuentra trabajando en una posible vacuna contra el COVID-19.
‘CureVac’ es una empresa ubicada en Tubinga, Alemania, y se especializa en la investigación y el desarrollo de medicamentos y vacunas innovadoras.
Tan importante es el trabajo que está llevando a cabo esta empresa financiada por Hopp que hasta el propio Donald Trump está muy interesado en comprarla.
