Abril es el mes de la concientización sobre el cáncer testicular. Esta afección se trata del cáncer más común en hombres de 20 a 35 años. Justamente, el rango etario que dura la carrera de un futbolista profesional.
La mayoría de los casos se pueden tratar con éxito, también si es diagnosticado tarde. Igualmente, para lograr los mejores resultados, es de vital importancia estar al tanto de la enfermedad y realizarse los chequeos de salud con frecuencia.
Existen varios casos de futbolistas reconocidos que han sufrido esta enfermedad y han podido superarla exitosamente gracias a los tratamientos correspondientes. En muchos casos pudieron continuar con su carrera.
8) Sergio Aragoneses:
Sufrió dos veces cáncer y ambas fueron de testículos. Una, en 2005, cuando acababa de llegar al Elche. Luego de sobreponerse, en 2007, en una revisión de rutina le volieron a detectar la misma enfermdad. Una vez, logró ganar esa batalla y, tiempo después, se sumó al Tenerife.
7) José Luis Sixtos:
El exfutbolista mexicano se destacó como defensor central en Cruz Azul y Puebla. En 2001, mientras jugaba para el Puebla, recibió la noticia de que tenía cáncer testicular, una enfermedad que lo obligó a alejarse de las canchas por un tiempo.
La noticia del diagnóstico fue un golpe duro para Sixtos y su familia, pero el jugador decidió luchar contra la enfermedad y someterse a un tratamiento riguroso para combatirla. Tras un período de ausencia, Sixtos regresó al fútbol mexicano en 2003. Pero lo hizo por poco tiempo, ya que se retiró muy pronto.
6) Sebastian Haller:
A mediados del año pasado, con 27 años, Sebastian Haller dio el gran salto de su carrera al Borussia Dortmund, para reemplazar nada menos que al noruego Erling Haaland.
Pero el 22 de septiembre, se confirmó la noticia más dura de todas: tenía cáncer testicular. Luego de un duro tratamiento, le ganó a la enfermedad y el pasado 22 de enero volvió a jugar al fútbol.
Posteriormente, el delantero de Costa de Marfil declaró que le tenía miedo al cáncer, pero en su familia había un trauma por la muerte de su tía en el 2020. “La quimioterapia rompió mi cuerpo por dentro, la operación por fuera. Así que vas recogiendo poco a poco”.
5) José Francisco Molina:
En octubre de 2002, el mundo se derrumbó por completo para Jose Francisco Molina: sufría cáncer testicular. Poco más de tres meses después, volvió a las canchas para defender el arco del Deportivo La Coruña.
4) Jonás Gutiérrez:
El Galgo surgió de las inferiores de Vélez Sarsfield y dio el salto a Europa en 2005. Tras estar unos años en España, pasó al Newcastle y ese buen ciclo le valió para ir a jugar el Mundial de Sudáfrica 2010 bajo la dirección técnica de Diego Maradona.
Post Copa del Mundo continuó jugando para las Urracas y en octubre del 2013, en un duelo contra el Arsenal, chocó con el francés Bacary Sagna y sintió algo raro.
Tras realizarse estudios le saltó un tumor en el testículo izquierdo. Luego de tratarse efectivamente en Argentina, el Newcastle lo cortó. Retornó a Argentina y se retiró del fútbol en Almagro, un club del ascenso argentino que supo jugar en Primera.
3) Arjen Robben:
El neerlandés fue uno de los mejores delanteros del Siglo XXI. Con tan solo 20 años pasó del PSV al Chelsea y fue un traspaso que lo puso en el mapa del fútbol mundial. Aunque en el imaginario popular no es muy recordado que en 2004 le diagnosticaron la enfermedad.
Más allá de que la superó y luego se convirtió en un extremo deseado por todos los clubes del mundo. Pero con tan solo 20 años se repuso y no solo eso, sino que dolencias se calzó la camiseta de su seleccionado durante la Eurocopa disputada en Portugal.
2) Carlos Roa:
Lechuga hoy en día se encuentra lejos de las canchas, desde su temprano retiro por motivos religiosos. Tras ser el arquero de Argentina en el Mundial de Francia 1998 y ser uno de los mejores en su puesto en la liga de España, su carrera sufrió un parate por un cáncer testicular.
“Fue durísimo porque uno no se prepara para eso. Era batallar de vuelta contra algo complicado y difícil. Me abrieron toda la panza para sacarme los tres tumores que tenía”, contó.
1) Luboslav Penev:
En febrero de 1994 el delantero búlgaro, que por aquel entonces tenía 28 años, tuvo que abandonar la actividad. Jugaba en el Valencia, pero debió priorizar su salud para tratar un cáncer en los testículos.
Los médicos del equipo español detectaron el tumor gracias a un doloroso pelotazo que recibió el jugador durante un encuentro. Luego de un año, se recuperó y volvió con el Atlético de Madrid para ser una de las figuras del equipo campeón de 1996.