Un equipo que cayó por siete goles, un equipo que ganó con pura fe, así es esta Costa Rica de Fernando Santos, que ahora sueña con meterse a la siguiente ronda del torneo con solo un remate al arco y un gol en dos partidos.
Es que lo de Costa Rica ha sido una especie de cosa de locos, tras el primer tropiezo en la Copa del Mundo, se le dio la primera final para tener vida en la Copa del Mundo y la ganó solo con un remate al arco y mucha fe de su gente, que se dio cita al Ahmed bin Ali Stadium a pesar de la decepción del primer duelo.
El único tiro a puerta de los Ticos en toda la Copa al Mundo, fue de Keysher Fuller, el autor del único gol del partido ante Japón y de Costa Rica en la Copa del Mundo, que le permite por ahora ser una de las selecciones con vida en el Grupo E, conminado a ser uno de los más difíciles por tener dos campeones del mundo como son Alemania y España.
Lo de Costa Rica, destaca por el triunfo y por la forma, según los datos de Opta, Costa Rica hizo 624 toques, pero lo curioso del dato es que todos fueron en tres cuartos de cancha sin tocar más que dos pelotas en el área contaria.
Es por eso que el gol Tico fue festejado con todo por el desierto catarí, es que el estadio Ahmed bin Ali está en pleno desierto, casi en medio de la nada, sin embargo, de la nada apareció Fuller para anotar ese gol que ahora ilusiona a los Ticos, y avisan, “Que se cuide Alemania”, como dijo un aficionado con la “pura vida” que los caracteriza.