En la historia de la NBA, ha habido numerosos intercambios que han tenido un impacto significativo en la liga y han cambiado el rumbo de las carreras de los jugadores involucrados. Sin embargo, hace años pudo darse uno de esos canjes potenciales que habría tenido un efecto masivo en liga, con Los Angeles Lakers como principal protagonista.
Para ello habría que retroceder el tiempo hasta 2004, es decir, hace 19 años, cuando Lakers intentó enviar a Shaquille O’Neal a Dallas Mavericks, todo para hacerse con los servicios del talentoso Dirk Nowitzki, según ha revelado el medio AS. En ese momento, los californianos estaban experimentando problemas internos entre Shaq y Kobe Bryant, a pesar de haber ganado tres campeonatos de la NBA juntos en 2000, 2001 y 2002.
El equipo buscaba una solución para superar las tensiones y decidió explorar la posibilidad de intercambiar a O’Neal, una de las figuras más dominantes en la historia del baloncesto, por Nowitzki, quien también estaba emergiendo como una estrella en ese momento.
Lo que pudo ser
Los Mavericks mostraron interés en adquirir a Shaq debido a su habilidad para dominar en la pintura y su capacidad para cambiar por completo el rumbo de un equipo. Sin embargo, el dueño del equipo de Dallas, consciente del potencial de Nowitzki y su valor como jugador franquicia a largo plazo, se negó a deshacerse de él.
Así, esta decisión del propietario de los Mavericks alteró por completo el destino de la NBA en los años venideros. Si el intercambio se hubiera llevado a cabo, la carrera de Shaq después de su paso por los Lakers habría sido completamente diferente. Habría sido interesante ver cómo encajaba en el sistema de los Mavs, rodeado de jugadores talentosos y con un enfoque diferente en comparación con los Lakers.
Por otro lado, el impacto en la carrera de Nowitzki también habría sido significativo. Al unirse a los Lakers, habría tenido la oportunidad de jugar junto a Kobe Bryant en su mejor momento y competir por campeonatos de inmediato. La combinación de las habilidades habría sido una amenaza formidable para cualquier oponente.