ElIlioupolise preparó para defender la cima delGamma Ethniki, torneo del tercer escalón del fútbol griego, ante el Ermionida, que ocupa uno de los últimos lugares de la tabla. Lo que se suponía que iba a ser un partidazo terminó en tragedia y angustia.
Es que tras 11 fechas, el club de las afueras de Atenas lideraba el Grupo E de la categoría con 28 puntos, tres delante de su escolta, y estaba confiado en hilvanar una nueva victoria para mantenerse en soledad en aquella colocación. Sin embargo, el resultado y las estadísticas dejaron de tener importancia.
Al quinto minuto del duelo ante Ethniki,Alexandros Lampisse desvaneció sobre el césped de su estadio. Tanto sus compañeros, como el cuerpo médico y todos los colaboradores que estaban presentes, intentaron reanimarlo, pero no hubo caso.
En las instalaciones no había desfibriladores y tampoco ambulancias cercanas. La asistencia médica desde un hospital se demoró y volvió irreversible la situación. Lampis, de 21 años, falleció a causa de un paro cardíaco y el equipo le dedicó unas palabras en homenaje.
“Nuestro Aleko, nuestro amigo, nuestro hermano, te fuiste tan injustamente. Todo el equipo, toda la ciudad está de luto hoy. No salen palabras… solo un dolor insoportable y un nudo en el estómago. Que tengas un buen viaje Alekara“, escribieron en su cuenta de Facebook.