Hay una extensa cantidad de jugadores surgidos en el semillero del fútbol argentino que en la actualidad se encuentran en Europa. Pocos han pasado por las inferiores de Boca y de River a la vez, pero existen casos de ese tipo. Sin embargo, hay un futbolista que posee eso en su historial, y que en paralelo goza de un pergamino actual especial, siendo el único argentino que milita las filas de un equipo de Inglaterra que no juega en la Premier League.

Arquero y de Mar del Plata como el Dibu Martínez, y representando al Wycombe Wanderers de la tercera división inglesa, Franco Ravizzoli conoce el ascenso profundo de Inglaterra al haber iniciado su periplo europeo en la sexta categoría, trabajando a la par del fútbol en un café: “Me fui literalmente sin nada“, llegó a expresar tras haber dejado atrás su paso previo por las inferiores millonarias y su fallido paso por Boca, club del cual era hincha de chico pero las experiencias vividas en su carrera lo hicieron cambiar de equipo. Desde las cercanías de Londres, Ravizzoli habló en exclusiva con BOLAVIP y contó su historia.

Franco Ravizzoli en Wycombe (IMAGO)

-Llegaste hace varios años allá, ¿estás completamente adaptado a Inglaterra?

-Sí, sí, este es mi quinto año, va a ser ahora en noviembre. Súper adaptado, pero te diría que hasta ahí igual. Todo lo que es estilo de vida, todavía hay cosas que me cuestan. O sea, lo que es el clima me cuesta todavía adaptarme y el estilo de vida como si fuese la costumbre que tienen acá, también. El hecho de estar solo, sin mi familia y sin compañeros argentinos, me ayudó a terminar de mamar bastante la cultura de ellos y las costumbres como para no desentonar tanto, ¿viste?

-¿Allá estás 100% solo?

-Sí, 100% solo. Entendí que si querés jugar la de argentino 100% te va a costar mucho y probablemente nunca te adaptes. Yo encuentro un balance digamos. Por ejemplo, no sé, si nosotros estamos acostumbrados a cenar tarde, y acá lo hacen más temprano, en mi casa ceno como a las ocho. Esas cosas te adaptas: te vas a dormir más temprano, como hacen acá, y así trato de balancear entre las cosas argentinas y las de acá.

-¿Hablás o compartís algo con los argentinos que juegan en la Premier?

-Soy el único argentino en EFL (segunda, tercera y cuarta división inglesa) y realmente hay argentinos acá pero están todos en la Premier. No hablo con ninguno así diariamente, sí hablé con hace un tiempo con Julián Álvarez, que compartí plantel con él en River. Cuando estuvo en el City hablábamos, y de hecho me invitó a ver un partido, que nos sacamos una foto. Con él nos conocemos de la reserva de River, compartimos un año más o menos. Nos llevamos bastante bien.

-¿Cómo es el día a día en un equipo de tercera división inglesa?

-El Wycombe es un club bastante chico, es un club muy familiar, es muy antiguo, con mucha historia. Hace algunos años estuvo en segunda. Siempre fue un equipo que se mantuvo en mitad de tabla para arriba. Y después la infraestructura es increíble, aunque un poco te acostumbrás estando acá porque en la tercera división hay muchos clubes que tienen estadios que ya tienen un tipo de infraestructura de primera, entonces te sorprende pero hasta cierto punto. Yo hace unos años estuve dos temporadas en el MK Dons, otro equipo y teníamos un estadio impresionante, un estadio a nivel de Premier League con un Hotel Hilton adentro, imaginate. Jugamos en el estadio del Sunderland, el del Bolton, el estadio de Ipswich, el de Swansea. Son todos tremendos.

-¿Cómo se viene desarrollando esta temporada?

-Las expectativas son grandes este año, lo estamos preparando bien, el año pasado tuvimos una muy mala primera mitad de temporada y la segunda mitad de temporada muy muy buena, estadísticamente si la segunda mitad de temporada hubiese sido un torneo aparte hubiésemos quedado cuartos. La idea era volver a ese nivel este año. Tenemos un plantel muy bueno y muy competitivo, hay muchos jugadores en cada puesto que hace que ninguno se relaje. Las expectativas son grandes, pero también somos bastante realistas y sabemos que hay equipos muy grandes en la división, hay equipos que están gastando mucho dinero como es el Birmingham o el Wrexham, el equipo de Ryan Reynolds, y tienen casi la obligación de ascender. Un objetivo realista para nosotros serían los playoffs.

-Más allá de que está la segunda división en el medio, ¿soñás con la Premier League con Wycombe o llegando a otro club?

-Si, obvio que si. Mi intención es repetir el nivel de la segunda mitad de la temporada pasada y que sigo teniendo ahora, que haciéndolo y jugando la mayor cantidad de partidos posible sé que eso me va a llevar a un nivel más alto, ya sea a la segunda, un objetivo a corto plazo y por qué no Premier League a un poco más mediano o largo plazo. El objetivo ahora es seguir manteniendo mi nivel, disfrutar lo que estoy haciendo porque en el año pasado no jugué mucho y ahora sí. Quiero disfrutar y seguir construyendo la confianza y seguridad que tengo hoy en día.

-Tenés como referencia el caso del Dibu Martínez para eso…

-El caso de Dibu es extraordinario porque fueron cesiones y logró no solo llegar a la Premier, sino ser probablemente el mejor arquero del mundo hoy en día, y a ganar todo lo que ganó con la Selección. Él tuvo un crecimiento muy repentino y si, me motiva que hayan casos como el de él que pasaron de League One o Two a la Premier League.

Franco Ravizzoli en MK Dons (IMAGO)

A pesar de ahora encontrarse en tercera división, lo cierto es que el salto de Franco Ravizzoli desde Argentina a Inglaterra se dio a las profundidades del ascenso británico, ya que desembarcó en un desconocido equipo de la sexta división inglesa.

-¿Cómo decidiste irte de Argentina a un lugar tan impensado como la sexta división inglesa?

-Llegué a acá directo a sexta categoría, a un club que se llama Eastbourne. Decidí cambiar un poco de aire, tenía que arrancar en algún lugar de cero, y en el momento no me importaba dónde, ni qué división, ni por cuánta plata, ni en qué club, solamente yo quería jugar y arrancar y que la gente me empiece a ver y conocer, porque si no iba a ser imposible. Y bueno, tuve esta posibilidad de que un club de sexta inglesa me abra las puertas. Tuve una muy linda etapa ahí, jugué bastantes partidos. En el medio cayó la pandemia. Ahí me trataron muy bien y encontré un nivel muy bueno ahí después de tanto tiempo que venía sin jugar. Eso también me llevó después al Milton Keynes (MK Dons), que me vieron jugar ahí. 

-¿Y por qué a Eastbourne?

-Después de River tuve un paso por Deportivo Merlo y después de una temporada ahí decidí irme, había tenido la posibilidad de firmar con Deportivo Morón pero las cosas no salieron de la manera en que yo quería y terminé rescindiendo después de dos meses porque no quería eso para mi en ese momento. Sentí que tenía que empezar de nuevo en otro lado, y primero me fui a España, literalmente sin nada a probar suerte y conocí a gente ahí que me pudo ayudar. Entre el mercado y el hecho de que no conocía mucho no pude conseguir nada. Y de ahí me vengo a Inglaterra porque yo conocía al ayudante de campo de Eastbourne, que es el primo de mi mejor amigo de toda la vida, de Mar del Plata, que se llama Sergio Torres.

-¿Cómo fueron los primeros momentos allá?

-Él me dijo que vaya ahí, que podía entrenar con ellos y mientras tanto me buscaban algún club para que pueda empezar de crecer y demás. Y bueno, llegué acá a Inglaterra y el arquero se lesionó por un par de semanas. El técnico me preguntó si yo quería jugar y le dije que sí, obviamente, que había venido para eso, por más que no me podían pagar nada porque ya tenían todo el presupuesto completo y el arquero iba a volver rápido. Igualmente, empecé a jugar, le dije que no quería plata en ese momento, solo quería jugar. Y bueno, anduve muy bien, el otro arquero volvió pero el DT me bancó a mi y me dejó en el arco. Después, con la pandemia se cortó la temporada esa.

-¿Y de ahí saltás a tercera división, ¿no?

-Mi primer partido en Eastbourne fue el 1 de enero de 2020, hasta marzo que se cortó más o menos la temporada, creo que había atajado 15 partidos más o menos en esa temporada. Y después de la pandemia vuelvo a arrancar, donde juego ya obviamente como arquero titular y demás, con un sueldo muy bajo pero con un sueldo y jugué más o menos 25 partidos esa temporada hasta que se cortó de nuevo por la segunda ola del Covid. Y ahí es cuando me llama el MK Dons.

-¿Cuál fue tu sensación cuando diste el salto?

-Soy partidario de que las cosas pasan por algo y justo ahí fue cuando el Milton Keynes me buscó. Creo que fue más o menos en febrero o marzo, y el campeonato suyo se seguía jugando porque era profesional, a puertas cerradas. Así llegué al club. Estuve entrenando dos o tres meses con ellos y cuando se abrió el mercado de nuevo, firmé el contrato por dos años y pude empezar a jugar.

Franco Ravizzoli en Wycombe ante Aston Villa por Carabao Cup (IMAGO)

Desde aquellas profundidades del ascenso de Inglaterra a subir un par de escalones post pandemia, Franco Ravizzoli pasó por un llamativo club como el MK Dons y posteriormente desembarcó al Wycombe, equipo en el que encuentra en la actualidad. En el medio, para lograr un mejor contexto económico, contó que tuvo que trabajar en una cafetería a la par del fútbol.

-¿Cómo te solventabas económicamente mientras atajabas gratis en Eastbourne?

-A ver… Yo estaba en Eastbourne y también entrenaba con otro equipo, y mientras tanto tuve que laburar aparte. Empecé a trabajar después de la pandemia, cuando vuelvo a Eastbourne, que ya había firmado el contrato, que era por poco dinero. Trabajaba en un café y ganaba literalmente lo mismo en los dos trabajos, el fútbol y el café.

-¿Te daban los tiempos para ambas cosas? ¿Cómo fue esa experiencia?

-Me ayudó mucho a mantenerme, porque antes venía aguantando con mis ahorros y con ayuda de mi familia. El trabajo en el café me vino excelente por dos motivos: primero por el tema económico pero también por el tema del lenguaje, me ayudó muchísimo aprender el idioma. El hecho de vincularme con la gente y perder el miedo y tener que hablar sí o sí me hizo aprenderlo por las buenas o por las malas. Entrenaba en Eastbourne los martes y jueves, en el café laburaba lunes, miércoles y viernes y los sábados jugábamos, así que tenía una semana cargada.

-Y hoy, en tercera división, ¿cómo se vive a nivel económico?

-Y… Depende del club, depende de la posición, porque hay jugadores en la división que cobran muchísimo dinero, pero muchísimo. Por ejemplo, en Birmingham, que están gastando mucha plata para luchar por ascender, te diría que cobran lo mismo que cualquier equipo de segunda o incluso de Premier League. Wycombe es un equipo que no es el que mejor paga, pero así todo, a mi me alcanza para vivir bien. Yo no tengo un contrato muy alto la verdad, pero sí uno que me da la posibilidad de alquilarme un departamento bastante lindo, de comprarme un auto bastante lindo y de vivir bien. Tampoco me sobra como para tirar manteca al techo; soy consciente que ahora no estoy haciendo dinero pensando en el futuro pero no es la idea actual. Ahora mi objetivo está en jugar y jugar bien, que eso es lo que a la larga lleva a uno a ganar dinero.

Franco Ravizzoli en Wycombe

Más allá de su actualidad en el fútbol inglés, Franco Ravizzoli también ahondó en su paso por River y por su juventud como pibe de inferiores en el semillero millonario, donde compartió pensión con varios jugadores surgidos de la cantera riverplatense y atrevesó gran parte del ciclo de Marcelo Gallardo desde adentro. Además, se detuvo en otras cuestiones de su pasado como juvenil antes de recalar a River como su paso por Independiente y Boca, donde vivió una situación inesperada que cambió por completo su carrera y su vida.

-¿Cómo era el día a día en River siendo un pibe de inferiores?

-Entrenábamos todos los días a la mañana, a veces en el club y a veces en GEBA (NdR: Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires). Yo vivía en la pensión y volvíamos para comer, de ahí nos íbamos al colegio de River que quedaba en el estadio y volvíamos tipo 6 de la tarde a la pensión, hacíamos lo que teníamos que ser, ponele la tarea o estudiar y teníamos un rato de ocio. A las 8 y media era la hora de la cena y ya después te quedabas en tu habitación o con los chicos charlando, jugando al pool, ping pong. Para un pibe eso era lo más lindo.

-¿Te costó irte de Mar del Plata en ese entonces?

-Si, obvio. Allá yo iba siempre al mismo club, estaba muy unido a mi familia y amigos, con una infancia muy linda y todo eso se extrañaba. Todo lo que implica Mar del Plata en si, como ciudad, también. Más que nada en el verano. Mi miedo más grande era que pudiera perder a mi grupo de amigos. Después con el correr de los años te vas acostumbrando y por suerte mi vida y mis afectos no cambiaron nada. Y todas esas experiencias me ayudaron muchísimo para prepararme para lo que estoy viviendo hoy que estoy solo acá en Inglaterra.

-Viviste el primer ciclo de Gallardo en River desde adentro. Contame un poco que veías desde tu lugar

-El primer año que yo estuve estaba Ramón Díaz, pero se fue al toque, después de salir campeón. Ahí nomás llegó el Muñeco y arrancó toda esa etapa hermosa, que le iba muy bien al primer equipo y dentro del club pasa como un efecto dominó, que le empieza a ir bien a todas las inferiores. Estaba presente esa energía positiva dentro. Con la Reserva he entrenado varias veces con primera, nunca me consolidé en el primer equipo, pero sí he entrenado con ellos, y él me ha pateado como le hace a los arqueros varias veces. Sí hemos hablado obviamente, pero no mucho. Lo que sí te queda es el profesionalismo y la línea con la que él se maneja, porque quiere que se inculque en todo el club. Todo ese profesionalismo, intensidad y el respeto que pregona para sus dirigidos.

Franco Ravizzoli en River (@franravizzoli)

-¿Solo en River te probaste para entrar a las inferiores?

-Cuando tenía 10 años jugaba en Mar del Plata y en Independiente. En el Rojo solamente jugaba en la Liga Metropolitana, porque si jugaba en AFA no podía jugar en Mar del Plata y todavía no quería vivir en Buenos Aires. Entonces, mis viejos hacían un sacrificio enorme para poder jugar un fin de semana en Mar del Plata, un fin de semana para Independiente. Así fue por tres años, de los 10 hasta los 13. De los 13 a los 14 hice lo mismo pero en Boca, que también jugaba la metropolitana. A los 14 años decidí que iba a mudarme a Buenos Aires, para jugar para Boca en AFA, iba a vivir a la pensión en Casa Amarilla.

-¿Por qué no seguiste tu camino en Boca?

-Desde el club me rechazaron la pensión porque decían que eran limitados los espacios y no me la quisieron dar. Querían que yo me quedara en el club, pero tenía que pagar un alquiler en mi propio departamento. Me acuerdo que el director deportivo de ese momento le dijo a mi mamá que nosotros éramos una familia de bien y que teníamos la posibilidad de alquilar un departamento.

-¿Y ahí es que vas a River?

-La verdad que eso me molestó y me dolió un montón, a tal punto que me volví a Mar del Plata y no quise jugar en Buenos Aires ese año, preferí quedarme jugando con mis amigos allá. Y ahí fue cuando vino River, que me quiso llevar. Fui a River dos semanas y el entrenador de arqueros de ese momento me dijo algo que me acuerdo textual: “Franco, nosotros te queremos ahora o para el siguiente año. Si te llaman de algún otro club, por favor, llámame, si es que querés jugar en River”.

-Claro, se querían “reservar” tu pase, digamos

-Si, y encima volví a Mar del Plata y a los días me llaman de Boca de nuevo, que querían que vuelva. Pero después de haber visto lo que era River, no quería ir a Boca. Había un contraste fuerte de lo que eran los clubes por dentro. River me había encantado. Ahí fue que lo llamo, le aviso que tuve un llamado de Boca y al rato me devolvió el llamado diciéndome que querían que viaje a Buenos Aires ese mismo fin de semana a firmar los papeles para sumarme al próximo año. Así que en 2013 fue que me fui para River.

-¿Boca no volvió a intentar convencerte?

-Pasa que yo tenía decidido quedarme en Boca, de hecho estaba todo muy dado. Tenía literalmente todo firmado y esto no es joda, tenía casi todo empacado porque iba a ir, estaba confirmado y uno o dos días, antes no me acuerdo bien la exactitud pero fue esa cercanía cuando me comunican eso y fue como baldazo de agua fría. Pero todo pasa por algo y la verdad que gracias a Dios que pasó porque hoy soy como soy por las experiencias, por River y por todo lo que viví ahí. 

-¿Hubo amor por la camiseta en el medio de estas decisiones o fue todo racional?

-Mira… Cuando yo era chico, cuando vivía en Mar del Plata, mi viejo era hincha de Boca, y yo era hincha de Boca también. Por eso cuando fui a Boca y me pasa lo que me pasó con la pensión, ahí fue donde el sentimiento empezó a bajar un poco, porque fui conociendo ese tipo de cosas. De hecho, cuando yo voy a River, mi viejo me preguntó dónde quería jugar, y le dije que en River. De chico no elegí, pero después me sentí identificado con River desde un primer momento y de ahí me hice hincha de River. Y hoy soy hincha de River, de verdad y sin querer vender humo.

Ravizzoli con Gallardo en las inferiores de River (@franravizzoli)

-¿Qué amistades te quedaron de aquellas inferiores de River?

-Soy amigo de Gonzalo Montiel, Ezequiel Centurión, y de Martínez Quarta y Lucas Boyé, que ellos son 96 pero compartí categoría. Tengo muchas amistades de la categoría 96 porque mi primer año en River no jugaba mucho en la 97, iba al banco pero en la 96 tenían a Augusto Batalla, que se iba mucho con la Selección, y el técnico de categoría porque le gustaba cómo atajaba. Me hice muy amigo de Lucas Boyé, de Elvio Gelmini, de Zacarías Morán Correa, que hasta hoy mantenemos una buena relación. Después en Reserva nos juntamos mucho en los 96, 97, 98. Por ejemplo, con Nahuel Gallardo, Julián Álvarez, Franco Petroli, y muchos más.

-¿Te ves volviendo a River en algún momento de su carrera?

-Obviamente que me gustaría en algún momento. Me gustaría volver, pero no sé, lo veo imposible. No sé si me gustaría volver al fútbol argentino, sacando a River. Nunca se sabe lo que puede llegar a pasar, dónde te va llevando la vida, las circunstancias, las experiencias, pero si me preguntás hoy, quiero hacer mi carrera acá en Europa.

-¿Dónde te gustaría jugar en Europa, más allá del Wycombe?

-Por el estilo del juego que tiene me encantaría jugar para Barcelona, obviamente por todo lo que representa para nosotros con argentinos por Messi, pero si tuviera que elegir acá en Inglaterra obviamente el Manchester City, que es hoy donde todo el mundo quiere jugar por el estilo y por lo ganadores que son, pero hay clubes con historia acá como Manchester United o el Chelsea que también me gustaría.