Atrás quedaron los altibajos que tuvo Boca a lo largo del campeonato. Aquellos encuentros por los puntos en los que se criticó duramente al entrenador del Xeneize pese a que este terminó segundo en la Zona 2 con 27 unidades. Números que lo depositaron en lo que parece ser su especialidad.
Con casi un año en el cargo, Sebastián Battaglia demostró tener el ADN Xeneize y, así como ocurría en la época de Bianchi, logró afianzar un equipo que se hace fuerte cuando las papas queman y que se impone ante la adversidad para alcanzar una marca impresionante.
En la previa de lo que será su segunda final al mando de Boca, Battaglia mantiene un hito que ilusiona a los de la Ribera y preocupa a todo Tigre ya que desde que asumió el cargo nunca perdió lo que se denomina un mata – mata. Una racha que se mantuvo a lo largo de las seis definiciones.
Si bien todas las llaves fueron en el ámbito local, en la eliminación con Mineiro aún estaba Russo, Battaglia logró darle a Boca esa mística con la que se impuso a Racing sin jugar bien o el nivel que se requiere para vapulear a Defensa y Justicia solo unos días antes. Alcanzó una presencia que le permite imponerse más allá del momento.
Vale destacar que sumados a estos dos encuentros por la Copa de la Liga, hay que sumarle los tres juegos de la Copa Argentina 2021 (Patronato, Argentinos y Talleres), donde fue campeón, y el duelo de esta temporada ante Central Córdoba con victoria 4-1.
Además, hay un séptimo mata – mata ante el Barcelona (ganó por penales) aunque este fue parte de un torneo amistoso en homenaje a Diego Armando Maradona. Aquel partido disputado en Medio Oriente finalizó con un empate en uno que derivó en los doce pasos
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