En los últimos días, el mundo del tenis se vio revolucionado tras conocerse la noticia de la finalización del vínculo laboral entre Carlos Alcaraz y Juan Carlos Ferrero. Casi en simultáneo, ambos protagonistas lo hicieron público a través de las redes sociales, pero el entrenador dejó en claro que no era una decisión suya, por lo que comenzaron las especulaciones.
Primero se habló de una cuestión económica, luego de la injerencia del padre de Carlitos y su deseo de tener un rol preponderante en el equipo y en la toma de decisiones de su hijo, también se deslizó que había un problema entre ellos por sus academias de tenis, pero el propio Juan Carlos Ferrero, en diálogo con Marca, es el que se encargó de desmentir prácticamente todas esas cuestiones.
El Mosquito afirmó: “Todo parecía que iba a seguir bien. Sí que es verdad que cuando se acaba un año se tienen que ver ciertas cosas a nivel de contratos. Y como en todo contrato nuevo, de cara a lo que es el año siguiente, había ciertas cosas en las que no estábamos de acuerdo. Como en todos los contratos, uno tira para un sitio y los otros para el otro”.
¿Problemas con el entorno de Alcaraz?
Ferrero, políticamente correcto como suele ser, dejó en claro que hubo diferencias de pensamiento, pero aclara que fue desde el entorno del murciano: “Desde el entorno de Carlos piensan en lo mejor para él y yo desde el mío en lo mejor para mí. Ha habido ciertos temas en los que no hemos estado de acuerdo las dos partes. Puede ser que se hubieran podido salvar si nos hubiéramos sentado a hablar, pero al final no nos hemos sentado y hemos decidido no seguir. Esto es realmente lo que ha pasado”.
También dijo: “El año ha sido muy bueno a nivel de resultados y la relación entre los dos ha sido todo el año espectacular. No hemos tenido peleas en ningún momento. La entrada de Samuel ha dado un aire fresco al equipo para que la relación pudiera durar de futuro. Ha sido un año muy bueno y, al acabar en Turín, sí que es verdad que todos teníamos la idea de que íbamos a seguir. Luego ha pasado lo que ha pasado y separamos nuestros caminos, pero en principio la idea era seguir y por eso yo le dije en el comunicado”.
Ni problemas económicos ni por las academias
“Yo he demostrado desde muy joven que el tema económico no era para mí lo más importante. Se ha hablado de que pedía más y es cierto que ellos han tenido un detalle siempre conmigo de tener un porcentaje muy alto por esos primeros años que estuve tan encima de él. Y se lo agradezco. Al final el tema económico he intentado dejar claro que no fuera uno de los problemas ni era el motivo por el que yo estaba en este proyecto”, dijo Ferrero.
Además, agregó: “No acepto algunas de las cosas que se han dicho, que yo anteponía que viniera a Villena y que él se tenía que adaptar a mí. Eso no es así. Durante los dos últimos años, hemos ido entendiendo poco a poco que Carlos, con la exigencia del circuito, quería pasar más tiempo en casa. Y los que teníamos que movernos éramos nosotros. Nosotros ofrecíamos la academia para poder entrenar siempre que fuera necesario, pero nunca fue una obligación. Nunca. Y ese es un aspecto que quiero dejar claro”.
¿Volvería a trabajar con Alcaraz?
“No cierro la puerta a volver a trabajar con Carlos. Con la relación que hemos tenido, cerrar la puerta definitivamente no sería lógico ni con él ni con el equipo. Yo quiero terminar bien con ellos. No estar de acuerdo en ciertos puntos no significa que no sigamos siendo amigos ni que no mantengamos muy buena relación. Yo le deseo a Carlos lo mejor y creo que tiene posibilidades de ser el mejor tenista de la historia. Es algo que he dicho en muchas ocasiones. Y, aunque no esté yo, tiene a gente alrededor que le puede preparar muy bien”, completó Juan Carlos Ferrero.
