Si algo le faltaba a Lionel Messi en esta noche de Champions League en la que PSG derrotó 2-0 al Manchester City de Guardiola era ser el encargado de hacer el famoso cocodrilo en la barrera cuando el partido estaba llegando a su final.

Acostado con las manos en el pecho y la espalda a la pelota, el diez pudo respirar tranquilo porque Mahrez definió por arriba de la barrera. Unos minutos después fue el turno de Mbappé para hacer el cocodrilo. 

Un ratito antes de ir al piso, Messi fue pura alegria tras convertir su primer gol con la camiseta del PSG en una carrera a toda velocidad, pared con Mbappe y definición con la pierna más habil al palo cruzado setenciando así una victoria contundente sobre el Manchester City