Daniele De Rossi se permitió por un momento sacar de plano a Roma, equipo que este domingo se enfrentará a Sassuolo por la jornada 29 de la Serie A, para dedicar en plena conferencia de prensa unas palabras a Daniel Osvaldo, amigo que le dejó el fútbol y que sorprendió al confesar públicamente que está atravesando una profunda depresión, por lo que también hizo un pedido de ayuda.

“Digamos que hablaré con Dani, porque realmente es mi hermano. Hablamos hace dos días después del partido contra la Fiorentina. Nos enviamos fotos de los viejos partidos Fiorentina vs. Roma. Hay una relación tan íntima que preferiría no expresar nada. También porque no sabía nada, o mejor dicho, no lo sabía todo, respondió ante la consulta por el exdelantero de Boca.

De hecho, Daniel Osvaldo jugó un rol decisivo para terminar de convencer al mediocampista de dejar el club en el que había jugado toda su vida para darse el gusto de defender la camiseta del Xeneize y jugar en La Bombonera, incluso cuando el delantero ya se había alejado del equipo en conflicto con Guillermo Barros Schelotto,

“Por mi parte, sabe que siempre estoy aquí para él, como cuando éramos compañeros. Como fue para mí cuando estaba en Argentina y como será ahora. Si lo necesita lo tendrá”, aseguró De Rossi, quien fue compañero de Osvaldo durante dos temporadas en Roma.

De Rossi y Osvaldo compartieron dos temporadas en Roma.

De Rossi y Osvaldo compartieron dos temporadas en Roma.

La confesión de Osvaldo

Poco después que se confirmara su ruptura amorosa con la periodista Daniela Ballester, Daniel Osvaldo sorprendió en las redes sociales con una cruda confesión, seguida de un pedido de ayuda. 

Hace tiempo que vengo lidiando con una depresión muy grande. Esa depresión me hizo caer en algunas adicciones como el alcohol y las drogas. Estoy en un momento en el cual mi vida se me está yendo de las manos y lo quería compartir con ustedes. Estoy con tratamiento psiquiátrico, tomando medicaciones. Tengo una enfermedad específica: falta de autoestima, depresión. Muchas veces vuelvo a caer en mis adicciones por enojo. Caigo en la autodestrucción y eso destruye también a la gente que tengo alrededor”, se sinceró.

“Prácticamente vivo solo encerrado en mi casa. No salgo a ningún lado, no hago nada productivo por mi vida. No me dan ganas a veces de levantarme de la cama. Les quiero contar todo esto porque creo que la única manera de la cual yo puedo salir es que se entere la gente lo que me está pasando. Como les dije antes, he caído en adicciones muy feas que solo llevan a que mi depresión se cada vez más grande. Estoy me hizo alejarme de gente que me quiere mucho. Me hace no tener ganas de ver a mi familia, de compartir cosas mis hijos”, agregó.