El mercado de pases está desarrollándose dentro del fútbol argentino, donde se dio a conocer una polémica incorporación para Independiente Rivadavia: el colombiano Sebastián Villa es nuevo refuerzo tras su paso por Europa, donde lució la camiseta de PFC Beroe Stara Zagora.
Tras marcharse hacia Bulgaria luego de ser condenado a prisión condicional con una sentencia de 2 años y 1 mes por su causa de violencia de género contra su ex pareja Daniela Cortés, el delantero de 28 años tendrá su segunda experiencia dentro de la Liga Profesional y firmará por dos temporadas con la institución mendocina, que le compró el pase.
El ex Boca no tendrá la posibilidad de regresar a La Bombonera, al menos en lo que resta del año, ya que en la fecha 10 del vigente campeonato que está en receso por la disputa de la Copa América 2024, se enfrentarán en el estadio Bautista Gargantini.
Tras afrontar 11 partidos, convertir 5 goles y aportar solamente una asistencia en la liga búlgara, Villa buscará ser fundamental dentro del esquema de Martín Cicotello, así transformarse en la principal figura del equipo que acaba de perder a Martín Reali, ya que se transformó en nuevo refuerzo de San Lorenzo.
El colombiano tenía apalabrada su vinculación al Ludogorests, pero las negociaciones se estancaron.
¿Qué dijo el presidente de Independiente Rivadavia sobre Sebastián Villa?
“No me preocupa el qué dirán. Está cumpliendo la condena y el fallo de la Justicia. Está derecho y eso habla bien de él. Todos cometemos errores en la vida, algunos más graves y otros menos graves. Uno siempre tiene que tener una oportunidad“, expresó Daniel Vila en Radio Mitre.
“Es una persona humilde y respetuosa. Puede haber tenido un momento de debilidad o vaya a saber qué le habrá pasado, pero está derecho y cumpliendo lo que la Justicia marcó“, sostuvo el dirigente, que aseguró que el refuerzo “es un jugador de élite, un fuera de serie, de esos elegidos para el fútbol”.
Cerrando el tema, concluyó: “No vale la pena el doble castigo, no es justo el castigo de la Justicia y el castigo social. Todos tenemos la posibilidad de redención cumpliendo la condena y de poder trabajar”.