Cuando Nacho Fernández dejó River para llegar al Atlético Mineiro, el volante creativo era una de las piezas más importantes del mediocampo de Marcelo Gallardo. Sin embargo, esto no impidió que el ex Gimnasia se marche a un bajo costo debido a una promesa que le había realizado la comisión directiva.
Con una cláusula de rescisión tasada en 8 millones de dólares, el Galo se llevó a una de las mayores figuras del fútbol argentino y River utilizaría ese dinero para saldar algunas deudas. Sin embargo, el equipo Brasileño terminó incumpliendo con los pagos mientras que en el Millo se agotó la paciencia.
Adeudando dos cobros del 2021 (uno de agosto y otro de diciembre) que suman un total de 1.6 millones, River decidió presentar una queja formal a la FIFA que derivó en no una sino en dos ofertas de pago por parte del Atlético Mineiro. Dos propuestas que lejos de calmar las aguas terminaron por agitarlas aún más.
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Acusando que el grueso de las ganancias del club llegan en el segundo semestre del año, Paulo Braz, director financiero del equipo Galo, detalló que desde Brasil enviaron dos ofertas que fueron rechazadas por River: “Lo que propusimos es si pueden esperar un plazo más largo a que paguemos par a que lo hagamos en tres o cuatro cuotas”, comentó.
Lejos de saciar las demandas del Millonario, Braz comentó que “el problema de la estacionalidad que tenemos en la primera mitad del año por el flujo de caja” y que buscarán abonar cuanto antes la deuda siempre y cuando la oferta sea aceptada por la dirigencia de River.
