“Anivel internacional la estatura le juega en contra”.
Corría el año 2017 y Nicolás Tagliafico la rompía en Independiente. Había llegado al club dos temporadas antes y ese año Ariel Holan había decidido darle la cinta de capitán pese a que sólo tenía 25 años.
Diez años antes, en el 2007, había tenido su debut con la celeste y blanca, en la Sub 15 que por entonces dirigíaJorge Theiler. Sin embargo, una década después, era Edgardo Bauza era quien parecía cerrarle las puertas de la Mayor. Todos lo pedían para una Selección que debía prepararse para Rusia pero su metro 72 parecía dejarlo afuera. El resto de la historia tiene una Copa del Mundo como corolario.
Si hay algo que debe haber aprendido el pibe de Rafael Calzada es a encontrarle el gusto dulce a los malos tragos, aunque cueste. Pero ahora, a sus 30 años, queda claro que los mismos lo hicieron más fuerte.
Foto de su Instagram personal, enero del 2014.
Su primer contacto con el juego fue en baby Club Atlético y Social Villa Calzada pero para su familia fanática del Taladro no había otro destino que su paso por Banfield.
Desde su llegada al club del Sur pasaron casi 15 años, arrancando en preinfantiles hasta debutar en Primera. Por aquellos tiempos les pedía autógrafos a ídolos Garrafa Sánchez cuando se los cruzaba, el camino a llegar hasta ahí ya había comenzado.
Las condiciones futbolísticas y la personalidadde aquel lateral zurdo lo llevaron no sólo a su primera citación a la Selección juvenil sino también a firmar su primer contrato, con apenas 14 años. Su relación con la celeste y blanca siguió por varios años: pasó a laSub 17 de José Luis Brown y también más tarde a la Sub 20: con ambos equipos tuvo la chance de disputar Sudamericano y Mundial. Y darse el gusto de vestir la cinta, algo que repetiría muchos años después ya con Lionel Scaloni como entrenador.
Antes de cumplir los 19 años, luego un gran Sudamericano Sub 20 en Perú (posteriormente, en el Mundial de Colombia, cayeron en cuartos de final y a él le tocó errar el penal con el que quedaron afuera)le llegó la oportunidad tan soñada de jugar en Primera: el debut en Banfield, con Sebastián Gallego Méndez como DT, el11 de marzo del 2011.
Y no, no fue el mejor año. Porque el Taladro perdió la categoría y estaba sumido en una crisis económica que obligó al club a cederlo: “Los motivos estaban originados principalmente en no devaluar la cotización de nuestros jugadores, la necesidad económica de ser transferidos, y, en caso de ser cedidos a préstamo, que sea solamente a clubes del exterior”, explicaba Banfield en un comunicado.
Así, además de ver al equipo de sus amores jugando en la B Nacional, él no podía hacer nada para cambiar el rumbo. Y se marchó al Real Murcia de España, de la Segunda de España. Allí vivió otra situación incómoda: el DT del equipo aseguró en conferencia que Nicolás le había pedido el cambio por “estar muy nervioso”. El Murcia se jugaba la chance de no descender a la Segunda B y las declaraciones rápidamente explotaron y el club decidió que no jugaría los últimos dos partidos (por la sanción a otro equipo, el Murcia logró mantener la categoría).
“Antes de empezar el segundo tiempo, el arbitro me agarró y me advirtió que, como tenía amarilla, al más mínimo roce me echaba”, contó Taglia después. “Tras un par de faltas me acerqué al entrenador para decirle que me saque. Tarde o temprano me iban a expulsar. Sería tonto dejar con diez a mi equipo”.
La revancha llegaría otra vez con la camiseta de Banfield, al regreso de su préstamo. Con Matías Almeyda como DT,en la temporada 2013/14 de la B Nacional, el Taladrofue campeón y él fue pieza fundamental, siendo capitán y una de las figuras. Sin dudas del paso por España supo sacar rédito.
Sus 90 partidos con la camiseta blanca y verde lo catapultaron a Independiente y una vez más su salida del club ayudó a solucionar algunos inconvenientes. “Banfield informa que se ha llegado a un acuerdo con Independiente por la venta del 37% de los derechos económicosde Nicolás Tagliafico (…).Tras haber transferido en febrero de 2015 el 63% de los derechos económicos y el 100% de los federativos en 2.440.000 dólares, se termina completando la operación por un total de 3.160.000 dólares”, dice el comunicado.
Apasionado por aprender, observador, analítico, respetuoso, aplicado y disciplinado, no le costó adaptarse ni tampoco ganarse el amor de los hinchas del Rojo. Referente del plantel pese a su edad, llevando la cinta le tocó nada menos que dar su primera (que no sería la última) vuelta en el estadio Maracaná. Si, mucho antes de la Copa América 2021, Taglia ya sabía lo que significaba levantar un trofeo allí.
Ahí está Nico, con la cabeza vendada por un golpe, con la medalla en el pecho y el trofeo levantado después de igualar 1-1 el partido de vuelta ante Flamengo. El, un lateral izquierdo zurdo, con proyección y llegada, era el capitán de ese barco que llevó a Independiente a triunfar una vez más en copas internacionales.
Pero en el medio de su crecimiento, la Selección no parecía tener lugar para él, por la altura, decía el Patón. “Sé de mis condiciones, pero tengo que contrarrestar eso con velocidad e inteligencia.A veces, para defender no es necesario medir más de 1,80. Uno puede tener otras cosas, pero el técnico de la Selección es el que decide. Me está siguiendo, así que tengo que estar tranquilo”.
Lejos de confrontar, Tagliafico siguió esperando su chance, al tiempo que pegaba el salto a Europa. Ahora sí, no por necesidad, sino por merecimiento. En el 2018 el Ajax de Países Bajos y de la mano, con Jorge Sampaoli como entrenador albiceleste, por fin tenía la chance de volver a jugar en la Selección.
En ambos equipos se ganó la titularidad.Erik ten Hag lo sumó al 11 y fue una de las revelaciones de aquella temporada de la Eredivisie: dos títulos (liga y Copa) y semifinales de la Champions. En la Selección, comenzó jugando los amistosos previos y se ganó el lugar para Rusia 2018.
Pese a que Argentina se tuvo que volver en octavos de final, el rendimiento del lateral dejó buenas sensaciones y fue Lionel Scaloni el que mantuvo prendida esa antorcha: le dio la cinta de capitán en sus primeros partidos, cuando el DT era aún interino y el futuro era incierto. El mismo supo definirse alguna vez como “un jugador de equipo”, algo que se notó siempre.
Pasó una pandemia durísima sin ver a su familia por un año, pero en la que aplicó la misma mentalidad que adentro de la cancha:“Fui a Argentina dos veces este año, pero no me permitieron verlos porque tenía que quedarme en la burbuja. Eso fue muy duro. Especialmente cuando viajás tanto tiempo y estás tan cerca de ellos. Mantenerme siempre positivo fue un gran desafío para mí. Afortunadamente, no soy una persona que se rinda rápidamente. Siempre miro hacia adelante. A las metas que quiero lograr en la vida ”, contó en aquel momento.
Consolidado en el Ajax (tres títulos de Liga, el último en mayo del 2022; tres copas; argentino que más goles metió con 13, acompañando en esa marca a Darío Cvitanich) y consolidado en la Selección, llegaron los títulos con Argentina: con la Copa América, se convirtió en el único argentino en ganar dos títulos en este mítico estadio.
Después llegó la vuelta en Wembley con la Finalissima, su despedida del Ajax, donde había comenzado a perder terreno luego de una transferencia frustrada,para asomar en el Olympique francés, y la previa del Mundial.
Sin ser titular indiscutido, intercalando la titularidad con otro crack como Marcos Acuña, Tagliafico salió a la cancha ante Arabia Saudita pero se sentó en el banco con México (luego fue titular con Australia y Croacia, además de la final).
Es que los dos, a su manera, la rompieron. Le dieron variantes a Scaloni en el lateral izquierdo, los utilizó como herramientas fundametales en el engranaje del fondo y también para el ataque, según el rival y las necesidades. Los dos, cuando les tocó ingresar, no sólo cumplieron, se destacaron y pusieron en aprietos al DT. Sin embargo, para la final, la balanza se inclinó para el lado del exBanfield.
“Se llega a la charla y yo no sabía que jugaba. Yo pensaba que jugaba el Huevo, me vi en el nombre y se me abrían los ojitos. Esas cosas que salen y me ha pasado también en la final con Italia”, confesó.
El festejo fue en continuado. Primero en el estadio Lusail, posando con Messi y la Copa, después en la caravana que intentó llegar al Obelisco pero que fue imposible por la marea humana que quiso ver a los campeones, más tarde en su casa en la que fue recibido por sus vecinos y declarado ciudadano ilustre de Almirante Brown, además de socio honorario de Banfield, el pelo teñido de rubioy luego, claro, con su casamiento con Carolina Calvagni.
El noviazgo había comenzado en 2014 vía Facebook y fue en 2021 cuando la pareja decidió dar el sí, pero en una ceremonia privada, luego de la Copa América. Sin embargo, habían dejado pendiente la fiesta para luego de Qatar… ¿Habrán fantaseaso con un festejo de este tipo?
Es que al mismo tiempo que tenían su gran fiesta de casamiento, también Taglia pudo celebrar con sus seres queridos el título del mundo, aunque muchos de sus compañeros no pudieron asistir por sus compromisos previos: con una réplica de la Copa, cantitos, camisetas, tatuajes alusivos y Muchaaaachos.
Fanático de la lectura, algo introvertido, exigente, detallista, dice que en el futuro piensa en ser entrenador. “Me gusta la idea de posesión, de controlar el juego, de tener la pelota, de manejar cada detalle posible. Que nosotros marquemos el ritmo del partido y que mis jugadores entiendan lo que están haciendo”, contó en una entrevista con La Nación. Y eso que aún no había conocido a Scaloni…