La generación posterior al Big 3 -que compartió parte del circuito con ellos, pero que nacieron unos años más tarde- supo tener grandes exponentes como Daniil Medvedev, Stefanos Tsitsipas, Dominic Thiem o mismo Alexander Zverev, pero la realidad es que no les fue sencillo competir a las sombras de leyendas del tenis, que encima dieron lo mejor de sí hasta entrados en edad. Uno de aquella generación posterior a Roger Federer, Rafael Nadal y NovakDjokovic es Emil Ruusuvuori, tenista de Finlandia que dio sus primeros pasos como profesional en 2013, aunque explotó algunos años más tarde.
Ruusuvuori nunca llegó a establecerse ni tuvo mucha continuidad, pero sí logró triunfos importantes ante jugadores que hoy en día marcan el ritmo del circuito como lo son Jannik Sinner, Carlos Alcaraz y Alexander Zverev. Al italiano lo derrotó en 2023 en Hertogenbosch -el historial el 5 a 1 a favor del número 1 del mundo-, al español en Masters 1000 de Miami de 2021 -historial 1 a 1- y al alemán en mismo certamen del mismo año y también está empatado 1 a 1 en los enfrentamientos entre sí.
Ruusuvuori y Carlos Alcaraz. (Foto: Getty).
Problemas de salud mental
Si bien Russuvuori supo ser número 37 del mundo, en el último tiempo su ranking cayó bastante y más todavía luego de estar casi cinco meses parado -actualmente es el 279 del mundo- por problemas de salud mental. En una carta que la ATP hizo pública, el finlandés afirmó: “El año pasado estuve cuatro meses y medio sin tocar una raqueta. Pero no fue por la razón que cabría esperar. Fue por mi salud mental. Cuando estaba mal, empezaba a olvidar cosas. Mi cuerpo estaba en un sitio, pero mi mente en otro. Pasaba de algo tan simple como casi olvidar mis raquetas a sufrir ataques de pánico”.
Además, agregó: “Supe que estaba yendo demasiado lejos en Roland Garros, porque lo que pasaba en mi cabeza en los torneos empezó a afectar a mi vida fuera de la pista. No podía dormir bien, hasta el punto de que empecé a tener pesadillas. Me despertaba sudando, con el corazón palpitándome y sin poder respirar. Me hacía pensar que me estaba volviendo loco. Me levantaba por la mañana e iba a entrenar, pero no estaba allí”.
“Se convirtió en una cuestión de rutina. Cuando llegó el momento de mi partido de primera ronda en París, sentí como si no estuviera realmente en la pista. No estaba presente, salvo por mis pies sobre la tierra batida, así que no me sorprendió perder en tres sets seguidos”, agregó Ruusuvuori.
ver también
Con la presencia de Djokovic y Federer, Nadal tuvo su homenaje en Roland Garros: el curioso gesto de por vida del torneo
Ataques de pánico en la cancha
“Intenté tomarme una o dos semanas de descanso para ver si eso me ayudaba antes de ir a Surbiton a una prueba del ATP Challenger Tour sobre hierba. En lugar de eso, tuve un ataque de pánico en la cancha. Te diría lo que sentí, pero no recuerdo el partido. Como puedes imaginar, estas cosas me daban mucho miedo. Empecé a tener ataques de pánico fuera de la pista, incluso cuando conducía”, contó Emil Ruusuvuori.
Ruusuvuori fue número 37 del mundo. (Foto: Getty).
Vuelta al circuito y presente
“Lo bueno de este proceso es que me he hecho a la idea de que puede que no vuelva a jugar. Antes ni siquiera era una opción. Todo giraba en torno a mi tenis y mi carrera. Pero, aun así, siempre tuve la idea de que volvería. Ni siquiera era una cuestión de tiempo. Tardé un tiempo en preparar mi cuerpo para volver a competir, y mi primer torneo de vuelta fue en febrero, en una prueba del ATP Challenger Tour en Tenerife. El primer partido fue horrible. Era muy difícil estar en la pista. El segundo fue un poco mejor, pero desde entonces he tenido altibajos”, concluyó Ruusuvuori.
ver también
“Es casi mediocre”: La comparación con Federer y Nadal que más molestará a Djokovic
ver también
Ganó dos Grand Slams, fue número 1 del mundo y afirma que Djokovic puede ganar Roland Garros este año: “No se lo puede descartar”
