Mientras todos las miradas del tenis apuntan al Masters 1000 de Toronto en el inicio de la gira por Norteamérica, el cuadro principal del US Open, el último Grand Slam de la temporada sufrió una sensible baja en las últimas horas. Se trata del tenista búlgaro Grigor Dimitrov, quien confirmó su ausencia del Abierto de Estados Unidos por lesión. 

El ex número 3 del mundo confirmó al medio Tenniskafe.com que ve prácticamente inviable una recuperación a tiempo de la lesión en el pectoral que sufrió durante su duelo ante Jannik Sinner en los octavos de final de Wimbledon. En ese encuentro, Dimitrov dominaba al número uno del mundo, pero una punzada en el pecho lo obligó a abandonar en pleno partido, entre lágrimas y bajo la ovación del público.

La dolencia fue diagnosticada como una rotura parcial del pectoral mayor derecho, y desde entonces el tenista no ha podido volver a competir. Según su equipo, la raqueta número 20 del mundo no estará en condiciones físicas para afrontar la exigencia en Flushing Meadows.

Dimitrov romperá una racha de 58 participaciones consecutivas en Grand Slam (Getty Images).

Esta ausencia también extiende una preocupante racha para el búlgaro, quien ha debido retirarse de sus últimos cinco Grand Slams por diversos problemas físicos. Aunque su nivel de juego en Wimbledon 2025 había despertado elogios y expectativas, nuevamente las lesiones le juegan una mala pasada en su carrera, marcada por altibajos pese a su indiscutible talento.

“A veces el corazón quiere seguir latiendo… pero el universo tiene un plan diferente para nosotros. Gracias por la inmensa ola de cariño, de familiares, amigos, fans, colegas y toda la comunidad del tenis… sus mensajes realmente me han ayudado a superar estos momentos difíciles. La recuperación empieza ahora. Nos vemos pronto”.

Grigor Dimitrov en sus redes sociales.

Dimitrov ya había cancelado su participación en los torneos previos al US Open, como Toronto y Cincinnati, lo que anticipaba su ausencia. Se espera que su regreso a las canchas se produzca en la gira asiática, con torneos como el China Open o el Masters de Shanghái como posibles escenarios para su vuelta.