En las semifinales de la Copa Sudamericana de 2014, River eliminó a Boca en un Monumental que se vistió de fiesta. Fue el primer triunfo importante del Millonario sobre el Xeneize después de muchísimos años de ver al eterno rival celebrar todo, fue el comienzo de la época más dorada de la historia del club.

En esa noche épica, donde pasó de todo, Marcelo Barovero le tapó un penal a Emmanuel Gigliotti a los pocos minutos de iniciado el duelo. Esa atajada cambió la serie, cambió la vida moderna de la institución. Inolvidable, la de todos los tiempos. 

Ayer a la noche, en diálogo con Super Mitre, Trapito aseguró que esa no fue la más importante, pero sí que ayudó mucho y defendió al Puma: "La atajada más importante no creo que haya sido el penal de Gigliotti, si contribuyó para toda esa serie con Boca y el inicio grandioso para el club, por esto estamos haciendo la nota. Injustamente se direccionó todo hacia Gigliotti, no fue el único responsable".

Sobre si algún día puede volver al club de Núñez donde lo aman deslizó: "Es difícil de responder, porque el fútbol es muy cambiante, nunca sabes las necesidades de una y otra parte, no lo descarto".

Por último, Barovero elogió a Franco Armani, quien llegó a River y también se convirtió en héroe: "La llegada de Armani tranquilizó todo, yo deseaba que Augusto (Batalla) tuviese otra suerte, pero todo lo que vislumbraba con su chapa Franco lo demostró".