Este sábado 13 de agosto, en el Resorts World Las Vegas, Teófimo López comenzará a desandar el camino que confía volverá a llevarlo a convertirse en campeón mundial, ahora en la división de peso súper ligero en la que ha decidido establecerse y que tiene a Josh Taylor como campeón mundial indiscutible.

Muchos fanáticos se han llevado una gran desilusión con la derrota del estadounidense de raíces catrachas en su última presentación, que fue además la primera de su carrera profesional. Siendo amplio favorito, fue derrotado en decisión unánime por George Kambosos y dejó escapar los cinturones de peso ligero de la AMB, la OMB y la FIB, dos de los cuales había conseguido tras dar un gran golpe y vencer a Vasyl Lomachenko.

Pero Teófimo está convencido de poder levantarse de ese traspié para demostrarle al mundo que todavía puede hacer historia. Su primera prueba será ante el mexicano Pedro Campa, este sábado. “Estoy emocionado por este nuevo capítulo en 140. Creo que, como luchador, no puedo decepcionar a los fanáticos. Tengo que darles un espectáculo sin importar cómo me sienta. Tengo la suerte de no estar muerto. Estoy ansioso por llegar a 140, tomar el control de esa división al igual que tomé el control de 135 al vencer al peleador libra por libra número 1 del mundo en ese momento, Vasiliy Lomachenko, y seguir adelante", dijo en diálogo con ESPN.

López aseguró que por más que algunos fanáticos se hayan sentido decepcionados con su derrota ante Kambosos él es el mejor boxeador de su tiempo. "Todavía creo que gané la pelea. Ya sea que la gente me llame delirante o no, soy el mejor de mi tiempo", manifestó.

Y vendiendo su próxima pelea, concluyó: "Todo el mundo tendrá que sintonizar la pelea el 13 de agosto para ver qué tan delirante soy realmente. Estoy deseando cosas más grandes y mejores para mi carrera".