Bien podría ubicarse a Vergil Ortiz entre esos peleadores que tienen todo para ser grandes campeones mundiales, pero que no logran conseguir la pelea necesaria para situarse como serio aspirante a un combate que le de esa oportunidad. Es cierto que Michael McKinson, su rival del próximo 6 de agosto, tiene un invicto de 22 peleas, incluso más amplio que el de 17 que registra el hombre de Golden Boy. Pero el británico no es una figura reconocida en tierras en que se cocinan las grandes peleas de campeonato.
De todos modos, el oriundo dePortsmouth, Hampshire, cree tener una gran oportunidad de darse a conocer al mundo y arrebatar, además, el título Internacional de peso wélter de la Organización Mundial de Boxeo al peleador nacido en Dallas, Texas, y de raíces mexicanas.
“Cuando se habla mucho de estos boxeadores en todo el mundo, no solo de Ortiz, soy un profesional muy hambriento, le he enviado mensajes a mi gerente varias veces para que me consiga a estos muchachos.No estoy en el boxeo solo para ser bueno y tener buenos logros. Estoy en el boxeo para tener grandes cosas”, comenzó diciendo McKinson en rueda de prensa.
Y ya a modo de advertencia para Ortiz, agregó:“Recibo muchos menos golpes que los últimos dieciocho oponentes de Vergil.Soy muy inteligente. Nunca ha peleado con un estilo como el mío. Nunca se ha enfrentado a nadie con tanta confianza como yo. Planeo traerle muchos problemas. Soy muy respetuoso pero tengo mucha confianza”.
McKinson agradeció la oportunidad de pelear con Vergil Ortiz
Michael McKinson reveló que venía pidiéndole a su agente conseguir una pelea ante Vergil Ortiz desde el momento en que comenzó a sonar con fuera en la división de peso wélter y es por ello que agradeció que finalmente se le diera la oportunidad.“Esto es enorme Estoy muy bendecido de tener esta oportunidad. Muy agradecido”.