El último sábado, en la cartelera que marcó el regreso de Andy Ruiz a los cuadriláteros con victoria por decisión unánime ante Chris Arreola, quien también mostró credenciales fue Erislandy Lara, que acabó con Thomas Lamanna con un nocaut en el primer round y se quedó con el título interino de peso mediano de la AMB.

Sin embargo, a la hora de pensar en su próxima pelea el nacido en Guantanamo no parece estar pensando en seguir intentando conquistar las 160 libras, sino que piensa en el golpe todavía más grande que podría significar convertirse en el campeón indiscutible de la división de peso súper wélter, algo para lo que deberá esperar por el ganador de la unificación entre Jermall Charlo y Brian Castaño.

 

"Cien por ciento, esa sería mi elección número uno. Si es mi elección, si depende solo de mí, pelearé con el ganador de la pelea entre Charlo y Castaño a continuación. No hay duda al respecto", expresó el peleador que ya midió fuerzas ante el argentino en marzo de 2019, en una pelea que finalizó con empate en las tarjetas.

"Sentí que lo derroté con bastante claridad y siento que lo haré de nuevo", dijo en diálogo con BoxingScene recordando un fallo que le pareció injusto. Además, el argentino se negó luego a hacer la revancha ante Lara, lo que lo llevaría a perder su título mundial de la Asociación Mundial de Boxeo, que ahora pertenece a Charlo.

"Todavía quiero hacer mucha más historia en este deporte. Todavía me queda mucho y estoy buscando grandes peleas. Espero asegurar mi futuro. Solo quiero pelear con los mejores. No me importa si está en 160 o 154. Espero conseguir algunos nombres importantes", concluyó.