El pasado 19 de junio, en Jalisco, Julio César Chávez confirmaba que la pelea de exhibición que acababa de culminar ante Macho Camacho Jr, en un evento que estuvo repleto de emotividad y en el que incluso se abrazó a Canelo Álvarez sobre el cuadrilátero, había sido su adiós definitivo al boxeo.
Con el paso del tiempo, El César fue incursionando en otros rubros como el de la publicidad y la actuación, incluso confirmando una gira teatral para realizar una obra llamada Los mandamientos de un hombre chingón. Pero bastó a que volviera a estar en su verdadera salsa, en su ambiente, para que ese adiós amague con convertirse solo en un hasta luego.
Invitado de honor a la tradicionalísima convención anual que realiza el Consejo Mundial de Boxeo, que después de 20 años volvió a realizarse en la Ciudad de México, parece que al gran Julio César Chávez solo le tomó un breve intercambio de palabras para dejar nacer la oportunidad de hacer un combate de exhibición nada menos que ante Floyd Mayweather.
El propio Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo, hizo pública esta posibilidad ante los presentes mientras los legendarios exboxeadores, sin dudas de los mejores de la historia, continuaban intercambiando risas y algunas palabras.
Luego el propio Chávez, por el sacudón que generó la noticia, se expresó al respecto. “Si él se anima, claro que sí. “Mayweather me dijo que él no es su tio. Yo le dijoe que no importaba, que lo iba a poner a chillar”, dijo muy sonriente a un grupo de periodistas que se le acercaron en busca de la primicia.