Si bien una amplia mayoría de especialistas y exboxeadores entendieron que las múltiples fracturas en el hueso orbital del ojo derecho que le ocasionó un uppercut furioso de Canelo Álvarez justificaron la decisión de Billy Joe Saunders y su esquina de ya no salir a pelear en el noveno, el británico recibió muchas críticas de parte de los fanáticos y de otros menos especialistas y expeleadores.
Al ahora excampeón mundial de peso súper mediano de la OMB se le recriminó no haber intentado terminar sobre el cuadrilátero, incluso buscando una remontada desesperada, la que fue la pelea más importante de su carrera, con otros dos cinturones en juego que estaban en poder del tapatío.
Curiosamente, Ben Davison, entrenador que estuvo en la esquina de trabajo de Saunders durante la pelea, reveló que el deseo del peleador apenas finalizado ese octavo round fatídico tenía más que ver con el deseo de cumplir con ese reclamo que con el de partir con rumbo al hospital más cercano.
“Hay una opinión muy mal interpretada de lo que sucedió en la esquina. Billy Joe regresó y se sentó. Yo me acerqué y le susurré al oído ‘has demostrado que perteneces a este nivel y obtendrás otro disparó porque esta pelea estaba cerca’. Estaba creciendo en la pelea, pero le dije que teníamos que parar y por eso negó con la cabeza como si dijera ‘no, voy a volver allí'”, comenzó relatando en diálogo conIFL TV.
Y siguió:“Permítanme aclarar algo sobre Billy Joe, no nombraré a nadie, pero ha hecho que los luchadores que son de buena calidad, que tienen mucho corazón, renuncien al gimnasio. Sólo negó con la cabeza para decir ‘no lo hagas’. Pero teníamos que hacer lo que teníamos que hacer. Billy Joe habría vuelto para la siguiente ronda, por supuesto que lo hubiera hecho, pero antes de que terminara la ronda estaba claro que teníamos que parar”.