El piloto mexicano Sergio “Checo” Pérez cada vez demuestra más su calidad en las pistas de la Formula 1, y esta vez no fue la excepción, pues consiguió una remontada en la Sprint del sitio 13 al quinto, situación que fue provocada por la sanción que le impuso la Federación Internacional de Automovilismo, después de que le argumentaron que excedió los límites de pista durante la Q2 durante las prácticas del Gran Premio de Austria.

Dicha situación le arrebató el cuarto lugar al oriundo de Guadalajara, Jalisco y lo obligó a salir en el puesto trece de la carrera de Clasificación. Esto derivó en una fuerte crítica por parte del volante azteca contra las autoridades del automovilismo mundial, ya que considera que el sistema de penalización no se encuentra en condiciones para aplicar las reglas como las plantearon esta temporada, ya que las sanciones no llegan en el momento adecuado, sino al final de una carrera.

Esto según Pérez, ocasionó que forzara su monoplaza RB18: "Sí, estaba fuera de los límites de la pista, pero creo que pagué el resultado de un sistema que no está al cien por ciento, porque debí de ser penalizado antes de la Q3 y no en la Q3 porque pierdo todos mis neumáticos, hago daño al motor, etcétera. Al final el sistema no está listo para este tipo de reglas, hoy me tocó a mí y mañana le tocará a alguien más", apuntó para Fox Sports.

Acerca de cómo sintió la carrera de Clasificación, Pérez destacó la forma en que consiguió el quinto puesto en Austria: "Ya no había mucho que arriesgar en la carrera Sprint, ya no iba a llegar a Russell de todas maneras, un quinto lugar que es importante para nosotros que desde ahí podemos pelear para mañana. Con una buena arrancada mañana, podemos estar en la pelea desde la vuelta uno".