Real Madrid y Espanyol de Barcelona abrieron esta jornada de sábado en LaLiga con un choque suponía la última oportunidad de los Merengues por meterse de nuevo en la lucha por el título de primera división en España. Horas después de que la Fiscalía presentante su denuncia formal por el caso Enríquez Negreira, el Santiago Bernabéu se manifestó de manera directa.
Jornada previa a la vuelta con Liverpool en la UEFA Champions League, de volver a buscar enverdecerse en LaLiga y de rotaciones en un Real Madrid donde la baja de Karim Benzema aparecía como mayor hito a tener en cuenta de cara a recibir al Espanyol en un Santiago Bernabéu soleado y con ambiente de fútbol en sus aledaños.
La fecha número 25 de LaLiga llegaba en medio de las denuncias oficiales y formales que ya fueron realizadas desde la Fiscalía en relación con ese caso Enríquez Negreira que en el último Clásico ya marcase tanta polémica. Mañana Barcelona tendrá que medirse con un hostil San Mamés en este sentido, pero antes todo pasaba por saber si los Merengues podrían recortarle puntos al líder del torneo.
“Siempre robando”
En una jornada donde Toni Kroos llegó a los 400 encuentros con Real Madrid, donde hubo rotaciones en todas las líneas de Carlo Ancelotti salvo la portería y donde se buscaba la victoria tras tres encuentros pinchando de manera consecutiva, los Merengues saltaron a un Bernabéu que sumado a todo lo anterior, estrenaba ya su techo retráctil.
Mientras Vinicius marcaba el empate y Eder Militao remontaba el choque, empezaron a escucharse diversos cánticos en el coliseo blanco contra el escándalo Enríquez Negreira y sus protagonistas: “Corrupción, en la Federación…Fuera, Fuera….Siempre robando, el Barça siempre robando”.
Mañana habrá reunión de directivos en un Real Madrid donde el escándalo Enríquez Negreira sigue pasando factura a todas y cada una de las patas del futbol español. El Santiago Bernabéu, lejos de no manifestarse tras los últimos pasos dados desde la Fiscalía.
