Rayados estaba llevando adelante un partido muy disputado con 10 hombres ante un Querétaro que en varias ocasiones generó peligro.

Pero a pesar de la desventaja numérica de jugadores, el equipo de Diego Alonso no se resignó y fue en busca de la victoria.

Y cuando no quedaba nada de tiempo, Jesús Gallardo desbordó por la banda izquierda y al mirar atrás, pudo ver a Meza que le pedía la pelota para rematar.

El argentino recibió el balón, se acomodó con un toque, levantó la cabeza y puso la pelota en el ángulo izquierdo de Alcalá. Un remate realmente imposible de atajar.

Así, Meza comienza a pagar con goles de gran factura la fuerte inversión que hizo el club por él.