Justo cuando parecía que ambas partes estarían cerca de llegar a un acuerdo, un comentario de Jerry Jones – propietario de los Dallas Cowboys – espantó a Ezekiel Elliott, haciendo que se regresara a Cabo San Lucas, México, para continuar alejado del equipo por su disputa contractual.

Cuando un reportero le preguntó a Jones sobre la situación de ‘Zeke’, el ejecutivo se limitó a responder “¿Zeke quién?”, algo que el agente del running back estrella aseguró que no solo no encontraron gracioso, sino que además consideraron una falta de respeto.

Es por eso que Jones, lejos de revelar detalles sobre las negociaciones entre ambas partes, decidió aclarar la situación, asegurando que “se había ganado el derecho” a bromear con Elliott y que no era más que un simple comentario sin ánimos de ofender.

“Me he ganado el derecho a bromear con Zeke. Quiero dejarlo bien claro, me he ganado el derecho a jugarle una broma”.

Elliott decidió ausentarse del campamento del equipo hasta que se le ofrezca una extensión de contrato acorde con sus pretensiones salariales, y amenaza con perderse la temporada hasta que se ponga en la mesa una oferta digna.

Los Cowboys, por su parte, han estado practicando sin su corredor estrella, y pareciera que se preparan para que esta disputa contractual se extienda incluso más allá del inicio de la próxima temporada regular.