A pesar de su claro talento y grandes números con la Universidad de Louisville, existían muchísimas dudas acerca de la capacidad de Lamar Jackson de ser exitoso en la NFL cuando llegó a la liga.

Muchos creían que debía cambiar de posición a corredor, mientras que otros alegaban que debía ser receptor abierto y nunca lanzaría un pase en la liga. No hace falta aclarar que todos estaban equivocados.

Y es que, con su última presentación ante los San Francisco 49ers, el mariscal de campo rompió otra cifra en la liga. Tras conseguir 101 yardas por tierra, se convirtió en el quarterback con más partidos corriendo para 100 o más yardas (4) en una campaña.

Jackson ha destrozado a las defensivas contrarias con igual facilidad por la vía aérea como terrestre y actualmente es el líder de la liga en anotaciones totales, cerrando las bocas de todos sus detractores.

A juzgar por todo lo que ha demostrado hasta ahora, incluyendo victorias ante Patriots, Texans y 49ers, Jackson está ganando distancia en la carrera por el premio al MVP. Todo esto apenas en su segunda temporada.

¡Qué equivocados estaban!