Este domingo, Boca y River disputaron el duelo de ida de la final de la Copa Libertadores más épica de la historia del fútbol.
En La Bombonera se vivió algo especial. Los nervios se apoderaron muchísimo de los hinchas, quienes no pudieron alentar como de costumbre.
Eso analizó el periodista Martín Liberman en Fox Sports:“El estadio por momentos se derrumbaba y por momentos era un silencio que se escuchaba”.
Y explicó:“Lo del silencio está relacionado con el nerviosismo, la tensión. Nunca escuché a la gente de Boca gritar como ayer y pocas veces escuché un silencio que se escuchaba”.
“Silencios propios de la tensión, de incertidumbre, disgusto, en esas caras se veían reflejadas esas sensaciones”, cerró.
A eso hay que sumarle los que no van nunca, pero aparecieron en esta final…