Hace un par de días, Steve Kerr se había mostrado sumamente frustrado con el esfuerzo de sus Golden State Warriors a la hora de hacer el cerco reboteador, pues permitían demasiados rebotes ofensivos.

Por si esto fuera poco, la derrota del pasado lunes ante Los Angeles Lakers expuso otro de los problemas más grandes a los que se enfrentará su equipo: las faltas personales, pues enviaron a sus rivales a la línea 39 veces:

“Por eso es que fue un juego tan decepcionante, especialmente en la primera mitad. Hablamos de no cometer faltas mil veces y decimos que tenemos que defender sin cometer faltas, y luego van y cometen 12 faltas en el primer cuarto. Es realmente frustrante”, comentó Kerr.

Asimismo, el entrenador volvió a enfatizar acerca del problema que están teniendo en los tableros, asegurando que, si no se solventa la situación rápidamente, tendrán muchos dolores de cabeza esta temporada:

“Si no arreglamos esto, estaremos en problemas este año. Lo sabemos. Somos un equipo defensivo distinto. Perdimos muchísima longitud en las alas y versatilidad, así que seremos un equipo defensivo distinto y tenemos que ser capaces de defender sin cometer faltas y asegurar rebotes”, concluyó Kerr.

Los de la bahía aún no pueden contar con Kevon Looney y Willie Cauley-Stein, dos pívots defensivos que, seguramente, ayudarán a remediar estos problemas para el equipo de Steve Kerr.