El último domingo, en el encuentro entre Chivas y Tigre, comenzó una novela que da que hablar: Tomás Boy, entrenador del conjunto local, le dejó en claro a André Gignac que él era el número uno, luego de que el delantero no lo haya podido superar en cantidad de goles (104) con la camiseta del ocnjunto de la ciudad de Monterrey.
Pero la disputa entre el DT y el jugador no iba a quedar ahí. Según ESPN, al terminar el partido, Claudio Boy, hijo del entrenador, esperó a los jugadores de Tigres para increparlos con insultos. Con quien más enfado mostró fue con Nahuel Guzmán. Los otros agredidos fueronJorge Torres Nilo y Luis Rodríguez.