Desde que Gerardo Martino tomó las riendas de la Selección mexicana, hemos visto cosas muy positivas que realmente ilusionan para la Copa Oro, especialmente en ofensiva.
Entre tantas características distintivas de este equipo, la que más se destaca es la facilidad para generar situaciones de gol y la eficacia de cara al arco rival: en los tres encuentros con elTataen el banquillo, elTriacumula una media de más de tres goles por partido.
En los tres triunfos de México en ese lapso (3 a 1 a Chile, 4 a 2 a Paraguay y 3 a 1 a Venezuela), hay otro dato que potencia aún más estos números en el ataque: entre esos 10 goles en tres partidos, ningún futbolista repitió en la red rival. El equipo tiene poder de gol en muchos de sus elementos, además de inquietar constantemente al adversario por la cantidad de jugadores que acumula en zona de definición.
El increíble número de bajas de cara a la Copa Oro ha sido un motivo de preocupación para todo el cuerpo técnico. Sin embargo, el último encuentro en Estados Unidos demostró que los reemplazantes están a la altura de las circunstancias.
Espérenlos. Allí va el candidato.