A mediados de 1997 llegaba Óscar Córdoba a Boca. El arquero no tenía mucha prensa, pero sabía que con el tiempo se ganaría el cariño de los hinchas.
En tres años y medio, logró vestirse de héroe para no solo ser dos veces campeón de la Copa Libertadores de América sino también para conquistar el mundo.
Fue quien defendió los tres palos del arco Xeneize ante el Real Madrid. Además, se cargó tres torneos locales. Una locura.
Más allá de todo esto, hubo una cosa que no lo dejó transitar tranquilo su muy exitosa etapa en el club: su relación con el presidente de ese entonces.
Se trata de Mauricio Macri, con quien tuvo una anécdota nada feliz que al día de hoy recuerda. “Me da alegría ver cómo reciben hoy en día a mis compatriotas en Boca. Yo entré por la puerta de atrás”, comenzó contando en El Show de Boca por Radio Rivadavia.
“Mientras estaba firmando mi contrato, entró Macri a la oficina y le dijo a otro dirigente:’¿Ya firmó el colombiano o traemos a Chilavert?’. Y le respondí que se iba a acordar de mí cuando me fuera del club”, cerró. Un papelón.